La Nación
Lecciones de la pandemia 1 29 marzo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Lecciones de la pandemia

 

Rodolfo Valderrama

 

Nunca la humanidad había experimentado una pandemia con las características de la actual, dada su letalidad, universalidad, trastornos mentales y recesión económica de larga duración aunque impredecible, con efectos perversos sobre el nivel de empleo y pobreza; su rigurosidad está relacionada principalmente con irracionales practicadas por casi todos los países del mundo.  Uno de los casos más estudiados es el desborde poblacional en especial en el período de post-guerra, agravado por crecimiento desigual (A mayor pobreza más crecimiento poblacional); en cuanto efectos nocivos sobre el  medio ambiente (A mayor poblamiento más deterioro), han triunfado intereses de las multinacionales (Por ampliación del mercado) y el dogmatismo religioso. Ahora tenemos una lección más con motivo de la pandemia,  pues según estadísticas la letalidad del virus (Fallecidos por millón de habitantes) es superior en la capital o ciudad  más poblada que en el resto del país, esto lo podemos verificar si comparamos la letalidad en Nueva  York y el resto de Estados Unidos, entre Bogotá y el resto de Colombia, entre Neiva y el resto del departamento.  Una vez concluya el 2020  haremos el ejercicio numérico en   varias regiones del mundo.

Sin desconocer que son múltiples las lecciones que deja la pandemia, otra irracionalidad a nivel macro, aunque propia del modelo de desarrollo, es lo referente a la concentración de la riqueza y creciente inequidad producto del crecimiento económico desigual de los estratos sociales, esto significa un índice de letalidad superior en los  grupos vulnerables dado el hacinamiento y otras desventajas; si en Bogotá la letalidad promedio es de mil fallecidos por millón de habitantes (9.000 fallecidos, 9 millones de habitantes),  en sectores pobres este indicador es mayor a mil, e inferior a mil en estratos altos.

Según pronósticos de la CEPAL con sede en Chile, América Latina será una de las regiones más afectadas producto de la pandemia, se prevé que al menos por un lustro  tendremos  altísimo índices de pobreza y desempleo e inclusive de crecimiento de la inequidad,  muy grave que ocurra esto, especialmente en nuestro país, teniendo en cuenta que antes de la pandemia teníamos una concentración de ingresos en pocas personas de las más altas en nuestro continente.  Por supuesto que si la correlación de fuerzas sigue favoreciendo al sector más retardatario, el uribismo, las mayorías estarán condenadas a tener más padecimientos, y es que de acuerdo con el programa oficial (Salvo el de la televisión) no hay propuestas que se aparten de la recetas de la ortodoxia neoliberal. ¿Será que seguiremos a la zaga en Latinoamérica en cuanto a efectividad de la protesta social, pero a la vanguardia en cuanto a tolerancia con nuestros verdugos, los politiqueros de siempre? rodovaldi@homail.com