“Les tocará apretarse la correa y llorar lágrimas de sangre “dijo Santos al pueblo cuando fue Ministro de hacienda. Y siguen con hambre. Conociendo la premisa de los ingresos que generan los impuestos, que han de destinarse a la satisfacción de las necesidades colectivas. Pero bajarles los impuestos a los empresarios y demás inversionistas del 33% al 25% y desaparecer los parafiscales que aunque dinero gaseoso, por lo difícil de conocer las ganancias de las empresas, algo dejaban, es grave. Tampoco pagan renta Los Consorcios y las Uniones Temporales, ni las Cooperativas. Y hablan de equidad. Con un aumento salarial miserable. La generación de empleo es una mentira. La reforma es regresiva no cumple con el objetivo de darle bienestar al pobre. Al respeto afirma Margáin Manautou: “que aumentar las tarifas, cuotas o tasas de los impuestos existentes o crear nuevos Gravámenes sin prever la reacción y comportamiento de los contribuyentes e Ignorar la situación económica de la fuente gravada, así como la del país, es llevar a un fracaso seguro las finalidades de la reforma y disminuir el número de los Contribuyentes honestos” Está reforma fue proyectada para exonerar a las multinacionales especialmente las mineras, de los impuestos vitales de nuestra economía. Además, comparar la clase media con promedio de 3.500.000 de ingresos, con los que ganan 20 ó más billones de pesos es una bellaquería. Sínicamente dice el presidente del Senado, “que la reforma le va dar a los colombianos más oportunidades y permite cerrar brechas, porque ingresos muy altos tienen que contribuir más con los impuestos, para que los que ganen menos de 3.500.000 no paguen” Lo que hace que los dueños del poder se amangualaron para saquear los dineros del Estado; no se quejan, porque saben que eligieron presidente de la República al que más les convenía. Los mismos Congresistas parece que propusieron las extras para aprobar la reforma a pupitrazo limpio y no ver los micos que sirven sus intereses, después, dirán que no leyeron el proyecto, estrategia ya conocida, para no dar espacio a las manifestaciones de descontento. Esta reforma se parece a la que quería privatizar la salud y la educación. La opinión pública debe estar atenta a las decisiones de éste Congreso para las próximas elecciones, cobrárselas. Ahora, si era tan conveniente para el pueblo la reforma tributaria porque no publicaron el proyecto en su totalidad en los medios escritos, ¡mamola! Como decía Gaitán. De cualquier color que sea la bandera de los políticos corruptos, sólo defienden la de robar.