La Nación
¡Los bancos, los únicos que ganaron! 2 20 abril, 2024
INVESTIGACIÓN

¡Los bancos, los únicos que ganaron!

A pesar de las fuertes medidas sanitarias y las restricciones en la movilidad, el sistema financiero mantuvo el dinamismo en sus operaciones de intermediación y su rentabilidad. El mejor resultado se registró en el Huila, seguido por Tolima y Caquetá. Sus capitales aglutinaron el 72,1% de los recursos y aumentaron en 11,9%.

 

 

RICARDO AREIZA

unidadinvestigativa@lanacion.com.co

 

A pesar de los escalofriantes estragos que deja la pandemia en la economía regional, los bancos llevaban la mejor parte.

La actividad financiera creció, aunque a un menor ritmo, pero conserva su robustez y su rentabilidad, según el último Boletín Económico Regional (BER) publicado por el Banco de la República.

En particular los créditos Finagro para el sector agropecuario registraron un crecimiento moderado en línea con la dinámica positiva en diferentes rubros de esta actividad.

En el segundo trimestre del año, la inmensa mayoría de los sectores económicos de la región obtuvieron resultados tremendamente desfavorables, menos los bancos, los únicos ganadores en medio de la crisis.

El sistema financiero a pesar de las medidas sanitarias y las restricciones en la movilidad, mantuvo el dinamismo en sus operaciones de intermediación.

No obstante, el aislamiento preventivo obligatorio redujo el número de transacciones realizadas de manera presencial en oficinas y corresponsales bancarios.

Sin embargo, se incrementaron las transacciones a través de las plataformas tecnológicas (banca virtual y móvil).

Al finalizar el primer semestre de 2020, el saldo de las captaciones en Huila, Tolima y Caquetá presentó un crecimiento de 18,8%.

“De esta forma, los depósitos en cuenta corriente representaron el 16,1% del ahorro financiero, y aumentaron en cerca de dos puntos porcentuales su contribución frente a igual mes de 2019.

Por su parte, los certificados de depósito a término10 y los depósitos de ahorro tuvieron menor participación dentro del total de los recursos captados del público.

La rentabilidad de los certificados de depósito a término (tasa de interés DTF promedio mes) entre junio de 2019 y 2020 presentó una disminución al pasar de 4,52% a 3,76% efectiva anual, en cada de los periodos.

El Tolima agregó 50,2% de las captaciones, seguido por Huila con el 41,5%, y Caquetá con 8,2%.  Las tres capitales concentraron el 74,7% de los recursos, con destacado incremento anual de 25,7% en Neiva.

 

Cartera

Según el estudio por estrategias el sector financiero se replanteó la colocación de nuevos recursos.

“Del lado de la oferta es natural que algunos Establecimientos de Crédito hayan modificado sus estrategias de crecimiento internas y sus políticas de apetito al riesgo, mientras que, del lado de la demanda, tanto hogares como empresas se han mostrado más cautelosos a la hora de adquirir nuevas deudas ante la incertidumbre de reactivación sectorial en la coyuntura”, confirmó la Superintendencia Financiera.

Al cierre de junio de 2020 el saldo de la cartera en la región fue de $15,87 billones, superior en 10,8%.

Por segmento de cartera, el grupo de hogares (líneas de consumo e hipotecario) sigue siendo el de mayor contribución (59,7%). Sin embargo, la mayor dinámica se presentó en la de consumo al obtener un incremento anual de 13,9%.

De otro lado, la cartera corporativa representó el 40,1% del saldo, donde la línea comercial avanzó en 16,1%, gran parte avalados en programas de apoyo a las empresas a través del Fondo Nacional de Garantías; mientras que el microcrédito se redujo 3,9%.

En términos absolutos, el mejor resultado se dio en Huila, seguido por Tolima y Caquetá. De otro lado, las capitales de departamento (Florencia, Ibagué y Neiva) aglutinaron el 72,1% de los recursos y aumentaron en 11,9%.

El saldo de la cartera en los tres departamentos con recursos en las condiciones de Finagro presentó un saldo de cartera por $2,1 billones, lo que significó un crecimiento de 7,4%. De acuerdo con el fondeo de los recursos la distribución de la cartera es: Redescuento 63,6%, Sustitutiva 29,6% y Agropecuaria 6,8%, donde cerca del 46% se concentró en el departamento del Tolima.

El financiamiento se orientó en un 52,3% hacia pequeños productores, en su orden para capital de trabajo e inversión en labores tales como: caficultura, ganadería de carne, arroz y aguacate.

 

Créditos para el campo

A pesar de la crisis sanitaria y la parálisis ocasionada por las medidas para contener la pandemia, los recursos desembolsados por Finagro para el sector agropecuario mantuvieron su dinamismo.

Entre abril y junio de 2020, en la parte crítica de la pandemia los recursos desembolsados por Finagro para el financiamiento del sector agropecuario en Huila, Tolima y Caquetá ascendieron a 350.370 millones de pesos.

De éstos, 139.130 millones se destinaron para el Huila (39,7); 186.683 millones para Tolima (53,3 ) y 24.558 millones para Caquetá.

El incremento anual  fue de 9,4% representado en los mayores empréstitos solicitados y dirigidos para la línea de capital de trabajo.

Comparativamente con el mismo periodo del año pasado registró una variación de 20,3%, especialmente en el Tolima. La participación  pasó de 7,1% a 6,7%.

Entre enero y junio de 2020, es decir, el primer semestre del año, los recursos desembolsados por Finagro para los tres departamentos totalizaron $624.339 millones, lo que representa una variación negativa de 0,5%, mientras que para el país en su conjunto crecieron 29,4%.

Líneas de crédito

Por líneas de crédito, la que obtuvo los mayores desembolsos fue la de capital de trabajo, al registrar $229.829 millones (20,3%), y lograr la más alta participación (65,6%).

Las mayores solicitudes aprobadas fueron canalizadas para el cultivo de arroz ($95.789 millones), seguido para el cultivo de café ($29.723 millones).

Por línea de inversión, los tres departamentos participaron con el 19,8% de los desembolsos, equivalente a $69.277 millones, lo que representó una disminución de 46,2% respecto al mismo trimestre del año anterior, dirigiendo los mayores empréstitos para ganadería de carne ($19.215 millones) y cultivo de café ($14.103 millones).

Además, la línea de normalización de cartera, a pesar de la crisis sanitaria, presentó un crecimiento muy significativo, en virtud de las mayores solicitudes para la reestructuración de pasivos financieros por parte de los usuarios del crédito.

¡Los bancos, los únicos que ganaron! 8 20 abril, 2024

Las ganancias de los bancos

Al cierre de mayo de 2020 los activos totales alcanzaron $2.090 billones de pesos, lo que representa un crecimiento real anual del 6%.

Aunque el sistema financiero permanece robusto, el coletazo de la crisis sanitaria ha tenido un impacto en las utilidades de las diferentes industrias.

La Superintendencia Financiera reportó que los Establecimientos de Crédito (EC) registraron reducciones en sus resultados acumulados equivalentes a $1.3billones frente a 2019, hasta alcanzar los $4.1billones.

Por su parte, la industria aseguradora registró $986 mil millones (mm) (-12% frente a 2019);  las sociedades fiduciarias $268.7mm (-10% frente a 2019) y las sociedades administradoras de fondos de pensiones $108.9mm (-78.9% frente a 2019).

En concreto, los canales de crédito, a pesar de la emergencia sanitaria se han preservado.

El saldo de la cartera bruta ascendió a $530.1b, una variación real anual de 7.4%, tasa superior a la reportada en febrero (5.1%) ante el dinamismo de los desembolsos al sector corporativo ($8.5b en mayo).

“La dinámica de los desembolsos, aunque positiva, se ha ralentizado frente a meses previos a la pandemia como febrero ($40.1b), al alcanzar en mayo $18.8b”, indicó la Superfinanciera.

Alta incertidumbre

La coyuntura sanitaria, según la Superfinanciera, ha generado una alta incertidumbre frente a la severidad y profundidad en la afectación sobre la economía y el empleo, lo cual ha evidenciado riesgos sobre el sector financiero que, de no ser analizados y abordados de manera responsable y ordenada, podrían desencadenar situaciones que impactarían negativamente a los consumidores financieros y dificultarían el curso de la reactivación económica.

La gestión y contención del riesgo de crédito se realizó bajo una estrategia integral. En una primera etapa, se establecieron herramientas para ofrecer alivios a los usuarios del crédito por la crisis sanitaria y luego, en el segundo semestre de 2020 a través del de acompañamiento a deudores.

“El sistema financiero colombiano cuenta con niveles de capital y liquidez adecuados para enfrentar los efectos derivados de la coyuntura sin comprometer el cronograma trazado para converger a los estándares de Basilea III en materia de capital, liquidez y gestión de riesgos, ni la estabilidad del sistema financiero como un todo”, aseguró la Superfinanciera.

“De forma similar, en ninguna otra industria vigilada se evidenció la necesidad de modificar los programas de convergencia a los diferentes estándares aplicables a su actividad”, acotó, lo que demuestra el blindaje, en medio de la crisis sanitaria que ha golpeado estruendosamente a otros sectores de la economía.