La Nación
EDITORIAL

Los dineros de la paz

El presidente de la República, Iván Duque Márquez, estuvo la semana pasada en el departamento del Caquetá y desde allí anunció que con la Ley de Crecimiento Económico –o reforma tributaria– “vamos a poder comprometer recursos de los Ocad Paz, Órganos Colegiados de Administración y Decisión, que están para los próximos años, para que empiecen a ejecutarse desde ya, rápidamente, para hacer la transformación en los territorios”. El Jefe de Estado visitó el municipio de El Paujil, donde, al lado del Representante Especial de la Unión Europea, UE, Eamon Gilmore, conoció los avances de los proyectos productivos de café, cacao, queso y ají, entre otros, que desarrollan los caqueteños en esta zona de ese departamento.

Según el mandatario de los colombianos, se encontró que los recursos del Ocad Paz “estaban desagregados en el tiempo; uno podría decir sí hay una lógica de que eso se va a implementar en años, pero hay obras que no dan espera, que necesitamos hacerlas rápidamente”. Por esta razón, dijo que se tomó la decisión de comprometer recursos del Ocad Paz, con el fin de adelantar las obras en los PDET del país y atender las necesidades, como las que se evidencian en Caquetá. “Sabemos las inmensas necesidades: las conexiones con el Huila, las vías terciarias permanentes, los puentes”, expresó el presidente Duque.

Es urgente que este anuncio del jefe de Estado se materialice cuanto antes. En el Huila, regiones afectadas históricamente por la guerra se han quedado esperando las famosas inversiones para la paz. En municipios como Colombia, Baraya, Algeciras, Campoalegre, San Adolfo en Acevedo, Santa María, en la zona rural de Neiva, hay sentidas necesidades que el Gobierno Nacional no ha atendido.

El presidente Duque, de paso, debería abrir la posibilidad que otras regiones huilenses golpeadas duramente por la violencia se vean beneficiadas con las obras PDET.

 

“En municipios como Colombia, Baraya, Algeciras, Campoalegre, San Adolfo en Acevedo, Santa María, en la zona rural de Neiva, hay sentidas necesidades que el Gobierno Nacional no ha atendido”