Un suboficial y cinco soldados profesionales conformaban una banda comprometida en homicidios y extorsiones. Los hermanos Luis Ángel Sánchez Méndez y Albeiro Sánchez Méndez, capturados en Neiva, formaban parte de la banda. Un suboficial y cinco soldados profesionales conformaban una banda comprometida en homicidios y extorsiones. Los hermanos Luis Ángel Sánchez Méndez y Albeiro Sánchez Méndez, capturados en Neiva, formaban parte de la banda. “Estamos limpiando la institución”, dijo el comandante de la Sexta Brigada del Ejército. LA NACIÓN, NEIVA Seis militares activos presuntamente miembros de una banda comprometida en asesinatos de guerrilleros y ‘drogadictos’, fueron capturados en la operación que permitió la detención de los hermanos Luis Ángel y Albeiro Sánchez Méndez, alias ‘La Boruga’, en la ciudad de Neiva. El desmantelamiento de la organización se dio luego de ocho meses de trabajos de inteligencia y contrainteligencia militar de la Sexta Brigada del Ejército con sede en la ciudad de Ibagué (Tolima), dijo el comandante de unidad militar, coronel Jairo Martín Sandoval en diálogo telefónico con LA NACIÓN. Los uniformados capturados fueron identificados como el cabo segundo Juan Andrés Ribon Pertuz y los soldados profesionales Ángel Alberto Ríos, Libardo Mahecha Espinoza, José Eliécer Vinasco Vera, Jorge Ariel Herrera Ramírez y Juan Diego Caicedo Sánchez. Además de alias ‘La Boruga’, considerado como el jefe de la banda y su hermano Luis Ángel; asimismo fue detenido Juan Ignacio Cuéllar Díaz, en Chaparral (Tolima). Los detenidos al cierre de esta edición se encontraban en las audiencias de legalización de captura, imputación de cargos y medida de aseguramiento ante el Juez Segundo Penal Municipal de Ibagué con Funciones de Garantías. Homicidios El coronel Sandoval manifestó que según las investigaciones, la banda estaría vinculada en amenazas y extorsiones a comerciantes, ganaderos y finqueros en los municipios tolimenses de Chaparral, Ataco, San Antonio, Ortega y El Guamo. “No se tiene conocimiento que hubieran delinquido en el Huila”, dijo el oficial. Sin embargo, la Fiscalía imputó a los detenidos de concierto para delinquir, homicidio agravado, tortura, desplazamiento forzado y tráfico, fabricación o porte de armas de fuego de uso privativo de las Fuerzas Armadas. Agregó el ente acusador que los capturados supuestamente, “ultimaban a integrantes de las Farc y drogadictos” de los municipios de Chaparral, Ataco y Neiva. Indicó además que de acuerdo con las investigaciones, los civiles capturados, supuestamente, planeaban el hurto de una millonaria suma de dinero producto de la venta de una finca del Obispo de Garzón (Huila). Sostuvo además que algunos de los detenidos estarían comprometidos en el asesinato de dos sindicalistas. Militares activos Los militares para la época de los presuntos asesinatos que cometieron en los municipios tolimenses de Chaparral y Ataco y en la ciudad de Neiva, se encontraban adscritos al Batallón Caicedo. “Algunos de los soldados fueron trasladados, pero se continuó con el seguimiento”, manifestó el coronel Sandoval. Precisó que a los batallones Bolívar y Sucre en la ciudad de Tunja (Boyacá), fueron trasladados Ríos, Espinosa y Caicedo, además de Vinazco, respectivamente; unidades militares en donde fueron capturados los uniformados por efectivos del CTI. Mientras que el cabo segundo Ribon Pertuz fue aprehendido en la Escuela de Suboficiales del Ejército donde se encontraba en curso de ascenso. Y en el Batallón Caicedo en el municipio de Chaparral, fue aprehendido Herrera Ramírez. El grupo de uniformados continúa vinculado al Ejército mientras se adelanta el proceso penal en su contra. “Hasta que no se dicte la sentencia no podemos sacar a nadie de la institución, de ser condenados se les pide la baja automáticamente”, manifestó el comandante de la Sexta Brigada, al señalar que las capturas es el resultado de los trabajos de depuración, “estamos buscando limpiar todas esas frutas que se han dañado, estamos sacando la gente que no sirve en la institución”. Seis militares y tres civiles al parecer comprometidos en homicidios y extorsiones en el Tolima, fueron llevados ante el juez de garantías.