Un desprendimiento de tierra segó la vida de cuatro campesinos y dejo a dos más con heridas de consideración, cuando trabajaban con otros labriegos sacando balasto de la montaña para el arreglo de la carretera, en zona rural del municipio de Suaza.
La tragedia ocurrió ayer a las 1:30 de la mañana en un tramo de la carretera ubicado en el sector de El Vergel en la vía que comunica a las veredas Las Juntas y La Unión. "Se desprendió un poco de tierra, lamentablemente todos no alcanzamos a salir", recordó Asdrúbal Cabrera.
El alud acabó con la vida de Reinerio Méndez Rojas, de 46 años de edad; Wilson Losada Joven, de 36 años; Abimelec Zambrano Cortés, de 18 años y Víctor Alfonso Mamián Silva, de 27 años, quienes quedaron cincuenta centímetros bajo tierra.
En el hecho resultaron heridos Fabio Polanía Cuellar, de 22 años de edad, quien sufrió traumas en la pierna derecha, y Gerson Giovanni Álvarez Ipuz, de 40 años, con presentó traumas en el tórax. Los dos fueron remitidos al Hospital Local Nuestra Señora de Fátima y remitidos al Hospital San Vicente de Paúl de Garzón.
Cabrera, habitante de la zona de Las Juntas, manifestó que el grupo de campesinos se había reunido en la zona para trabajar en minga en la recolección de material para la carretera. "Nos habíamos convocado para cumplir con el alistamiento de material para que la maquinaria nos arreglara la carretera que está un tanto en mal estado".
Añadió que lo ocurrido es una tragedia para la comunidad. "Nos ha afectado mucho pues no esperábamos que eso ocurriera en esta minga que se convocó hoy".
Los cuerpos de los cuatro campesinos fueron rescatados por los mismos campesinos y ayuda de técnicos que trabajan en la vía nacional que va hacia Florencia (Caquetá), utilizando una retroexcavadora.
Campesinos manifestaron que en el sitio donde se presentó la tragedia siempre ha sido utilizado para sacar material de recebo. "Esta vez no tuvimos suerte, al parecer la lluvia debilitó el terreno que se desprendió cuando estábamos sacando material", manifestó un campesino que estuvo trabajando junto con las víctimas fatales.
Los cuerpos sin vida de los cuatro labriegos fueron trasladados a la morgue del hospital local hasta donde llegaron sus familiares y amigos consternados a reclamarlos.