En una multitudinaria ceremonia se realizó ayer la posesión canónica del nuevo obispo de la Diócesis de Neiva que llegó tras la partida de monseñor Ramón Darío Molina. En una multitudinaria ceremonia se realizó ayer la posesión canónica del nuevo obispo de la Diócesis de Neiva que llegó tras la partida de monseñor Ramón Darío Molina. Monseñor Froilán Tiberio Casas Ortiz fue recibido por cientos de feligreses que en medio de aplausos le dieron la bienvenida al carismático boyacense. Nuevo obispo sorprendido con la fe huilense. Vanessa Díaz Piedrahita LA NACIÓN, Neiva Desde el viernes que arribó a Neiva junto al Cardenal Pedro Rubiano e importantes prelados de la Iglesia Católica, Monseñor Froilán Casas Ortiz demostró su compromiso con el pueblo huilense que acudió al recibimiento del cuarto obispo que ha existido en los cuarenta años de historia de la Diócesis de Neiva. Luego de que su santidad Benedicto XVI hiciera su nombramiento el pasado 30 de enero, el Obispo que el próximo 21 de mayo cumplirá 64 años, arribó a la ciudad para ponerse al frente de los destinos católicos de los opitas. Se define como un hombre común y corriente, enamorado de Jesucristo al que ha conocido en su Iglesia Católica y que ha venido a ejercer en el ministerio del episcopado. “El ejercicio de todos los cristianos para que haya comunión, un solo cayado y un solo pastor”. La celebración Una impecable celebración religiosa que inició a las 10 de la mañana contó con la presencia del Cardenal Pedro Rubiano, del Arzobispo de Ibagué Flavio Calle, Arzobispo de Bogotá y primado de Colombia Monseñor Rubén Darío Salazar, Arzobispo de Pereira Rigoberto Corredor, entre otros prelados. El Arzobispo de Ibagué, Flavio Calle, quien fue el encargado de dar inicio a la solemne celebración que arrancó con el nombramiento del nuevo obispo, tomó la vocería para darle la bienvenida al nuevo pastor. Luego de hacer lectura del acta firmada por el Papa Benedicto XVI, en la Homilía Froilán Casas Ortiz destacó su interés por la realización de obras sociales que espera desarrollar en su estadía. “Le damos la bienvenida y lo acogemos en la provincia eclesiástica de Ibagué, en la que hacen parte las Diócesis de San Vicente del Caguán, Puerto Leguizamo, Florencia, Garzón, Neiva, Espinal, Líbano, Honda e Ibagué, donde se forma una unidad bien profunda, una verdadera fraternidad”, agregó monseñor Calle. Hacia el medio día, culminó la celebración litúrgica en medio del coro angelical y de la ovación del pueblo neivano que presenció la posesión. Con un particular mensaje, Monseñor Froilán Casas se despidió de sus feligreses y los animó para seguir edificando en la fe de la iglesia. “Espero me excusen porque se alargó un poco la ceremonia y me imagino que están cansados, pero ahora pueden ir a disfrutar de un excelente almuerzo”, afirmó. Lo que viene… El plan pastoral que trae para la Diócesis de Neiva es el común denominador de toda la iglesia: evangelizar. Sin embargo, teniendo en cuenta que dentro de él existen métodos y estrategias, en consenso con el presbiterio el nuevo obispo de Neiva espera acordar concretamente para aplicar lo que se hace desde la Iglesia Católica. “Voy a entregarme a todos los niños, los jóvenes, los mayores, yo no tengo excepción de personas porque así me lo ordena el señor. Vivir para todos a la luz del evangelio”. Por otro lado, le dijo a LA NACIÓN notablemente emocionado que el recibimiento por parte de la comunidad neivana fue excelente “estoy confundido de tanta bondad y generosidad de la gente”. El nuevo representante de la Diócesis Neivana aseguró con una flamante sonrisa que va a estar dispuesto especialmente para los medios de comunicación. “Estoy abierto a los medios de comunicación para dialogar, para escucharlos y aprender. Mi mensaje para los feligreses es claro que los amo mucho”, subrayó. RECUADRO Monseñor Pimiento, el primer obispo Monseñor José de Jesús Pimiento, el primer obispo de Neiva participó de la celebración de la posesión no sin antes contar a LA NACIÓN como fue su experiencia. “Promoví la creación de la Diócesis de Neiva, la ciudad estaba creciendo y faltaba un pastor para guiarla. En 1972 se logró ese objetivo. Todo ha cambiado en la sede eclesiástica de la ciudad, ha mejorado mucho materialmente, pero con los problemas modernos va deteriorándose, pero la fe se va confortando y se va logrando una madurez espiritual, que se vio en la participación de la ceremonia, signo de fe y de esperanza”, contó con voz segura y firme. Monseñor Pimiento, quien fue obispo durante ocho años destacó que la Diócesis ha tenido un cambio absoluto y que la fe ha ido madurando con el tiempo. “El cultivo de los obispos ha producido mucho efecto y una evangelización más a fondo, se ha madurado la fe y se ha consolidado. Hay un manifiesto desarrollo de la vida cristiana y social en el avance de la ciudad, y una esperanza de un futuro promisorio”, contó. Para el primer obispo, el reto de Monseñor Froilán Casas es evangelizar más a fondo y hacer que el apostolado globalmente se desarrolle ampliamente y se logre una plenitud de vida cristiana. Gran celebración Las autoridades del Departamento también le dieron la bienvenida al nuevo obispo de Neiva, en compañía de presbíteros de las diferentes parroquias de la ciudad, de los obispos de ciudades como Ibagué, Espinal, Tunja y Girardot y de la comunidad católica en general se celebró la eucaristía que culminó con un almuerzo en honor al nuevo prelado. Cielo González (Gobernadora del Huila): “Yo soy una católica convencida y por eso estoy complacida de que nuestro obispo además de que tiene muchos nexos con el Departamento, viene a dirigir nuestros destinos espirituales. Sé que con el podemos continuar muchas labores sociales, entre la iglesia y gobierno departamental. Juan Carlos Ramírez (Comandante Novena Brigada): “Le doy una bienvenida a Monseñor Froilán Casas Ortiz, en nombre de toda la familia de la Novena Brigada, estoy seguro que como participes en el departamento con la ayuda de él y su guía espiritual acercaremos a los huilenses para tener una mejor seguridad”.