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Polémica por propuesta de revivir los mataderos municipales 1 25 abril, 2024
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Polémica por propuesta de revivir los mataderos municipales

Reabrir los mataderos municipales es la vía para bajar el precio de la carne de res. Así lo planteó el presidente Gustavo Petro al asegurar, además, que el costo de este alimento se ha incrementado por culpa de un “monopolio”. El sector ganadero del Huila le salió al paso a la polémica propuesta señalando que esta no es la salida para contrarrestar este efecto que obedece, entre otros factores, a la especulación.

Lucía Sánchez

Temadeldía@lanación.com.co

Ante el elevado precio de la carne de res que según el Dane subió 23.7 % en el último año y está impactando el bolsillo de los colombianos el presidente Gustavo Petro puso sobre la mesa una polémica propuesta. Se trata de la posibilidad de revivir los mataderos municipales, pues aseguró que el costo de este alimento de la canasta básica se ha incrementado por culpa de un monopolio que no permite que los trabajadores rurales comercialicen sus productos.

“En el caso de la inflación, del Invima, Colombia no puede quedar en manos de un monopolio de frigoríficos de carne de res. Se ha llegado a ese punto porque este Instituto acabó con la figura del matadero municipal, hay que dar vuelta atrás”, dijo el mandatario.

Según indicó, los mataderos municipales acabarían con los monopolios que afectan el valor de la carne en Colombia. “Hoy se ha elevado el precio interno, no porque cueste más, sino porque han equiparado el precio internacional de la carne que le pagan al exportador de ganado en pie y el producto de esto es hambre en Colombia”, agregó.

El sector ganadero del Huila le salió al paso a la polémica propuesta del mandatario señalando que esta no es la salida para contrarrestar el alza de los precios de la carne de res.

Comité reacciona

Luceny Muñoz Bermeo, directora del Comité de Ganaderos del Huila, afirmó que, si el objetivo fundamental es bajar el precio de la carne para el consumidor final no considera que esta estrategia sea tan factible. “No creo que abriendo los mataderos municipales se solucione el alza en los precios ni todos los inconvenientes que hay en la cadena de valor, más allá de habilitar estos lugares que están abandonados y en malas condiciones, se debe pensar en una propuesta que sí disminuya además el carneo y abigeato”, dijo la vocera del sector ganadero en el departamento.

Referente al alza sostenida en los precios de la carne de res expresó que el sector trabaja por el fomento al consumo, el cual ha disminuido por el incremento en el costo de este alimento, y considera que hay una cadena de valor que se debe revisar.

“Hoy los precios son justos para el ganadero frente a los costros de producción, lo que sucede es que pasar del eslabón primario al comercializador y luego al consumidor implica una brecha enorme y ahí es donde deben entrar a revisar las entidades encargadas, para mirar qué está pasando y presionar para que no haya especulaciones. El kilo de ternero está en un promedio de 8 mil pesos”, expresó Muñoz Bermeo.

Así se rige el mercado

La directora del Comité de Ganaderos del Huila explicó que el marco legal que hoy rige en el país para el sacrificio de animales tiene, como foco principal, la adopción de medidas necesarias para la protección de la salud y vida de las personas. Esto amparado con la expedición del Decreto 1500 de 2007, que dio vida al “reglamento técnico a través del cual se crea el Sistema Oficial de Inspección, Vigilancia y Control de la Carne, Productos Cárnicos Comestibles y Derivados Cárnicos, destinados para el consumo humano y los requisitos sanitarios y de inocuidad que se deben cumplir en su producción primaria, beneficio, desposte, desprese, procesamiento, almacenamiento, transporte, comercialización, expendio, importación o exportación”.

Antes de expedirse esta norma existían en el país más de 1.600 mataderos los cuales no cumplían con mínimas normas de inocuidad y sanidad, ni disponían de técnicas de sacrificio. Entonces, con la entrada en vigencia de este decreto se la asignó al Invima la tarea de inspeccionar y liquidar muchos mataderos.

La líder gremial recordó que a raíz de esta normativa a nivel del departamento se inscribieron las regionales, “en este caso el Huila tiene habilitadas las de Rivera, Garzón y Pitalito, además de otras cinco que son de carácter de autoconsumo, lo cual es permitido”, dijo.

Señaló además que las “plantas de beneficio han garantizado la sanidad y trazabilidad de la carne que nosotros los consumidores adquirimos en los centros de distribución, pero también es cierto que con el cierre de los mataderos de carácter municipal se crearon unos inconvenientes que se han venido sumando, como al abigeato, carneo y la informalidad en el sacrificio”.

“Como gremio vemos que, si bien las palabras del presidente suenan a anuncio, se está llamando a un trabajo de concertación con todos los actores para llegar al mejor escenario sin que ninguno se afecte. Hay posiciones desde todos los escenarios”, añadió Muñoz Bermeo.

El llamado de Fedegán

Por su parte la Federación Colombiana de Ganaderos -Fedegán- pidió al gobierno controlar la intermediación que el gremio denomina “ociosa” porque rompe la cadena productiva de la carne y, además de esto, especula con los precios de este alimento básico en la ingesta de los colombianos.

José Félix Lafaurie Rivera, presidente ejecutivo de Fedegán dijo que “no existe un monopolio. Me hubiera gustado que las plantas de sacrificio que hay en Colombia, sobre todo las plantas de primera, en vez de estar haciendo maquila para terceros, vendieran carne”, señaló.

Enfatizó que, de ser así, la carne sería más barata y tendría un precio menor. Además, no se especularía con las tarifas de este bien altamente nutritivo para los consumidores finales.

“En el caso de la capital del país, de Bogotá, el caso es evidente. Esta ciudad consume el 23 por ciento del total del sacrificio nacional, sin embargo, las dos grandes plantas de sacrificio que hay en ella -Guadalupe y BLE- no venden ni comercializan un kilo de carne”; añadió.

Lafaurie Rivera manifestó que “los colombianos sin excepción alguna tienen la constante inquietud sobre por qué ha subido tanto el precio de la carne y, yo les digo, que se debe a que existe un fenómeno de especulación muy clara”.

Evidentemente “cuando el precio del novillo aumenta, al mismo tiempo sube el de la carne, pero cuando baja, como sucedió en junio, julio, agosto y septiembre, la carne, según el Dane, continuó con su tendencia alcista”, agregó.

Los mataderos municipales

“Lo que dice el presidente Petro es posible. Todos los municipios pueden sacrificar reses para autoconsumo”, indicó Lafaurie.

Dijo que “las plantas municipales pueden vender carne para el autoconsumo. ¿El municipio de Choachí, por ejemplo, puede sacrificar sus reses para atender el mercado? Claro que pueden. Las normas lo autorizan. La norma le dice también que no puede vender carne para Bogotá si no cumple una serie de requisitos que tiene que ver con la inocuidad del producto. Lo que se intenta hacer por parte de un país medianamente civilizado es que el consumidor coma una carne inocua y que no le haga daño al cuerpo”.

Sostuvo que acá existe un tema de inflación muy alta. En el caso de Colombia se debe controlar a los intermediarios que “yo llamo, ociosos, como se lo he planteado a la ministra de Agricultura, Cecilia López Montaño”.

“Creo en la intermediación y en el encadenamiento de un producto, pero lo que les planteo de los intermediarios sucede en todos los alimentos que produce el sector agropecuario”, puntualizó el dirigente.

“Nosotros no comercializamos”

En esta misma línea se expresó Jimeno Durán García, gerente de Ceagrodex, una de las principales plantas de sacrificio del Huila con autorización del Invima que presta sus servicios a municipios como Aipe, Baraya, Campoalegre, Garzón y Gigante.

Durán García indicó que el presidente Gustavo Petro está mal informado, porque los frigoríficos o las plantas de beneficio no venden carne, “nosotros prestamos servicio a los comercializadores, ahí hay una equivocación muy grande”. En este sentido planteó que el Estado “debe hacer mucho más eficiente al sector ganadero, mejorar la oferta cárnica del país y cuando esto pase seguramente se regulan los precios”.

E insistió: “Nosotros no comercializamos, hay una cadena que se encarga de esto, que es la que responde al precio del ganado, es decir, hay algo muy claro en este sentido y es que esto está obedeciendo a una ley de la oferta y la demanda. Hay una escasez de alimentos en el mundo, la proteína de origen animal, la carne de res es muy demandada y los precios han venido creciendo”.

Finalmente, Durán García dijo que hay otra situación particular y es que el 90% de los ganaderos del país son pequeños empresarios, “en el caso de Huila esto es demasiado evidente, ellos han venido soportando unos precios muy bajos, hay algo que ha estimulado el mercado y han sido las exportaciones, pero no son los factores causantes del mayor precio del ganado, porque además el hato ganadero en los últimos años ha venido creciendo”.

En contraste, el ganadero huilense Jorge Cárdenas Gutiérrez sostuvo que es “una buena intención el plantear una medida para bajar los precios de la carne para el consumidor; además, que los costos que tiene la persona que beneficia los animales disminuirían en los lugares donde hay buena productividad ganadera como en Antioquia, Caquetá, Córdoba, Meta”, sin embargo, dijo que “el Huila que depende mucho de los ganados del Caquetá va a verse impactado favorablemente pero no tanto como uno quisiera, porque esta dependencia incluye factores como los transportes que hay que pagar para sacrificar. Pero en términos generales esperamos que los precios tiendan a bajar un poco, que no solamente se queden en la cadena de suministro, sino que se transfieran al consumidor final”, afirmó.