La Nación
¿Por qué pagar la vacuna contra el Covid-19? 1 25 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

¿Por qué pagar la vacuna contra el Covid-19?

 

Alexander Molina Guzmán

 

Ya las grandes farmacéuticas alistan los manteles para sentarse a la mesa y devorar el suculento negocio de la vacuna contra el Covid-19. Claro, les van a dar prioridad a los países más ricos, los demás tendrán que esperar más tiempo para resolver el asunto. Porque ya lo dijo uno de los hombres más ricos del mundo, Bill Gates: “Por la forma en que trabajan, algunas farmacéuticas primero ayudarán a los países más desarrollados”. Por eso, él mismo planteó que habrá un escenario para el mundo rico y otro para “los demás”. Y aquí es donde la gente se dará más cuenta de lo deshumano que es el poder que nos gobierna a nivel global, pues si esta es una pandemia que afecta a cualquier persona, sin ninguna discriminación, no debería cobrarse esa vacuna; mucho más, cuando personas estudiosas del tema, como el premio nobel de medicina Luc Montaignier y la viróloga Li Meng Yan, afirman que el virus fue creado en un laboratorio y que tal vez “accidentalmente” fue liberado.

 

¿Por ser entonces un daño que se le ha hecho globalmente al ser humano, no debería unirse la ciencia para producir la vacuna y donarla a la humanidad? Por supuesto que crear la vacuna y producirla masivamente tiene un costo, pero al fin y al cabo la ciencia que se desarrolla para salvar a la humanidad de catástrofes como el ataque de los virus en sí misma no debería desarrollarse con ánimo de lucro, sino con sentido humanista. ¡Aunque sea financiada por la gente más rica del mundo! Porque no estamos hablando de producir una cosa masiva como carros, celulares, neveras…que satisfacen son otras necesidades y hasta deseos suntuosos. No. Estamos hablando es de producir una vacuna para salvar vidas humanas, vidas de personas que por el solo hecho de serlo se les debe garantizar el derecho a vivir…hasta un habitante de la calle, sólo por el hecho de ser una persona debería ser protegido contra el virus.

 

En situaciones como esta es donde la sociedad debe presionar a los gobiernos, a las multinacionales farmacéuticas, a los más ricos del mundo, para que demuestren su sentido de la humanidad, para que no vean al hombre como un objeto también de negocio y no conviertan su vida también en una “cosa” que se puede desechar sin ningún remordimiento. Porque sí es cierto, cuando perdemos el sentido de la humanidad perdemos el sentido de cuidarnos entre nosotros mismos y nos volvemos, como dijo un gran filósofo, en ese “hombre que es lobo para el hombre”. ¿Ya no lo somos?