La Nación
Proceso de paz con el Eln 1 18 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Proceso de paz con el Eln

En estos días en el país del Sagrado Corazón de Jesús, donde no cesa la polarización política, y se ven en las calles manifestaciones de apoyo al gobierno por sus primeros 100 días, como también expresiones ciudadanas en contra, aparece el corte de cuentas gubernamental: normalización de las relaciones con Venezuela, liderazgo internacional sobre el cambio climático y algunas iniciativas legislativas como ley tributaria, y trámite de otras como la reforma política, a la cual no le veo futuro. También el gobierno anuncia inicio de negociación de paz con Eln.

Del balance de los primeros 100 días, creyendo en la necesidad de sacar adelante reformas aplazadas, creo prioritario la agenda de paz. No hay un tema más importante en una sociedad civilizada que los procesos de paz y su negociación política para lograrla. Es la manera de evitar muertes, y en Colombia a pesar de los esfuerzos hechos, falta abordar otros, especialmente con la guerrilla del Eln, insurgentes esquivos a estos procesos.

En el pasado reciente en Colombia se llevó a cabo la negociación de paz con las Farc, con sus defectos y compromisos incumplidos aún, nos hizo mucho bien y el mundo entero aplaudió.

La negociación de paz con Eln, tiene ya negociadores por parte del gobierno (Otty Patiño, María José Pizarro, Iván Cepeda), sede en Caracas y garantes: Noruega y Cuba. Llama la atención la incorporación al grupo negociador del gobierno al presidente de Fedegán José Félix Lafaurie, no solamente porque es representante de la derecha y de un gremio comprometido en el pasado con los paramilitares que tanta violencia generaron, sino porque éste y su esposa, la senadora María Fernanda Cabal, son los mayores opositores al gobierno Petro, no es fácil entender cómo esta familia de políticos, uno va a favor de la paz y el otro en contra.

A Lafaurie le han caído rayos y centellas, de sectores que no creen en la sinceridad de su nueva postura y también de sus copartidarios, el exsenador Macías trinaba ayer pidiendo la renuncia de su militancia del Centro Democrático de donde es directivo.

Todo lo que se pueda hacer por salvar vidas y dejarnos de matar, vale la pena. La paz es un bien superior, que no se puede soslayar por dificultades que éste presente o inconsistencias políticas de los negociadores. A pesar de que con Eln muchos no son optimistas, porque éstos han sido renuentes o porque su estructura militar e ideológica es distinta a otras guerrillas, el esfuerzo hay que hacerlo con la mayor convicción. El proceso de paz con Eln es distinto al de las Farc.

Buen viento y buena mar, para el gobierno y los negociadores en este proceso de paz.