La Nación
COLUMNISTAS

Puntos de quiebre

No todos los seres humanos que nos rodean, aparentemente, son personas de comportamiento normal. Si usted se pone a analizar las caras de las personas, muchas son engañosas. Algunos que no tienen tatuajes, o, con pintas de chiflados no son tan chiflados, y, muchas “caras light” son engañosas; pues lindas caras nos estafan, nos engañan y nos venden cosas que no existen.

Si usted entra al parlamento, o, a las altas cortes. Encontrará gente bien trajeada y con aparentes buenos modales, pero la mayoría son personas inestables, ambiciosas, sociópatas con ansias de poder y deseos de apoderarse ilegalmente de no solo de los fondos, sino también de todas las riquezas nacionales. Encontrará  boquisucios como a esos que se les oye “te voy a romper la cara ma…” y hasta los han nombrado presidentes para que roben más. En fin, el comportamiento humano tiene unos quiebres que uno dice: “hombre en que momento se le pudrió o dañó la mente a tal o cual persona”, si antes era tan querida, tan amable y representativa de una supuesta sociedad. Yo, por ejemplo, no me explico porque en un momento difícil de nuestro país, en la época de Pablo Escobar, unos ganaderos de rancia tradición y herederos de viejas familias ricas de nuestro país, se les dio por meterse al negocio del narcotráfico, si antes vivían rico, nadie las perseguía y no necesitaban más dinero del que tenían.
Hablando de “quiebres siquiátricos” aún hay, o quedan, para mí, muchos huecos o vacíos en el presunto suicidio del copiloto alemán del accidente aéreo de Francia, reciente.

Los pilotos de todas las empresas tienen que presentar exámenes de rigor médico con la mayoría de especialistas. Sin embargo, es fácil engañar en esos exámenes.
De otra parte, siempre hay pilotos de reserva, para en caso de enfermedad de alguno, o de fatiga.

Pero la fatiga es difícil de medir, y, sólo puede ser manifestada por el piloto o copiloto para que se tomen las medidas correctivas.

Si alguien desea suicidarse lo hace generalmente solo, sin involucrar a nadie con excepción de los conductores borrachos. Pero la regla no es matar a más personas porque la novia lo dejó, o, porque alguien lo miro feo.

¿Cómo iba a saber el copiloto que se iba a quedar solo y aprovechar ese momento para matarse?

Hay algo que no me suena de toda la información que llega o que se inventan los periodistas.

Las compañías son muy exigentes antes de contratar a un piloto y eso de que el 50%  de los pilotos sufren de depresión es una total mentira, máximo se cansarán como ustedes y yo.
Aruz2050@yahoo.com.co