Alejandro Serna
Por estos días Neiva se ve un poco fea, como abandonada o desobligada, como dirían las abuelas: – “está como desaliñada, andrajosa o harapienta”-. Últimamente se ha vuelto común ver en nuestra capital huilense en los separadores viales, andenes y zonas públicas se encuentren despojos de arbustos, ramas y chamizas, que técnicamente se conocen como “residuos sólidos especiales de origen vegetal”, así como, otros residuos provenientes de la construcción y que en “stricto sensu” estos deberían ser dispuestos en una escombrera o en el relleno sanitario Los Ángeles. Esta situación generó que la Corporación Concejo de Neiva haya deliberado la semana anterior, sobre ¿qué es lo que está pasando?
De entrada, voces despistadas dirían, que el primer responsable sería “Las Ceibas EPN o Ciudad Limpia Neiva”, este último, bajo el entendido que es el prestador del servicio de aseo y que bajo el contrato 01 del 2013, le corresponde, la recolección de residuos sólidos domiciliarios, barrido y limpieza de calles y disposición final en el relleno sanitario de nuestra ciudad. Pero no, no es así. Esta situación fáctica administrativa ambiental, obedece, por las voluntades de los actores institucionales municipales a la luz del derecho ambiental, en especial, sobre el instrumento de planificación territorial, llamado Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos – PGIRS Neiva.
No obstante, aún con muchas inquietudes procedí a entrevistar a Luis Huguett Gerente de Ciudad Limpia en nuestro programa radial “Neiva: ¿Cómo vamos?”, en donde analizamos esta situación a la luz del Decreto Único Reglamentario 1077 del 2015, observando que “en los operativos para la recolección de los árboles caídos en espacio público por situaciones de emergencia, serán de responsabilidad de la entidad territorial, quien podrá contratar con la empresa prestadora del servicio de aseo su recolección y disposición final, en un margen de ocho horas siguientes al suceso.
La misma suerte, le corresponde al municipio hacer cumplir la normativa reglamentaria, toda vez, que la recolección de residuos de construcción y demolición, la “responsabilidad es del generador”, en donde la entidad territorial, deberá coordinar con los prestadores del servicio público de aseo o con un tercero, tomando las acciones para la eliminación de los sitios de arrojo clandestinos (escombreras) en las vías, andenes, separadores y áreas públicas.
En ultimas, ¿de quién es la responsabilidad? En el plano objetivo y competencial, le corresponde al Municipio con la Secretaría de Medio Ambiente y la Secretaría de Gestión del Riesgo. Sin embargo, desde el ámbito sociológico, la responsabilidad es de todos, ya que “la ciudad más limpia, no es la que más se barre, sino la que menos se ensucia”. De ahí, que entre todos debemos sacar adelante nuestro territorio y empezar a camellar por implementar estrictamente el PGIRS y enfocarnos por la cultura ciudadana en un adecuado manejo y disposición de los residuos sólidos en Neiva.