La Nación
Regalías: publicidad y realismo 1 25 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Regalías: publicidad y realismo

Germán Palomo García

Profusa y politiqueramente, el gobierno está promoviendo la nueva Ley de Regalías que “devuelve”, condicionados,  recursos que en el Acto legislativo No. 05 de 2011 cercenó  a las regiones con el argumento de que  estaban haciendo mal uso de las regalías despilfarrándolas en proyectos sin fundamento lo cual fue cierto en muchos casos.

En aquella ocasión, también hubo una campaña publicitaria costosa orientada a demostrar los malos manejos de los entes territoriales de sus ingresos por regalías y crear el escenario propicio para “nacionalizarlas” mediante una bolsa única y una burocracia rampante presidida por ministros o altos funcionarios nacionales. El periodista Mauricio Gómez fue uno de los contratados para presentar “informes especiales” sobre despilfarros y sustentar, de esa manera, “regar la mermelada en toda la tostada” según palabras del entonces ministro de hacienda hoy comentarista de la cadena radial Caracol, Juan Carlos Echeverri.

Pero lo que nadie defiende es que la primera destinación de las regalías que provienen de combustibles fósiles debe orientarse a reducir la alta dependencia de nuestra economía de recursos finitos como se  demuestra con la baja diversificación productiva del país (y el Huila lo sigue), en el comportamiento de nuestras exportaciones que se mueven según los precios internacionales de los bienes básicos (commodities) mientras que las exportaciones de los productos No petroleros ni de gas o minería siguen con valores reducidos y sin valor agregado en los procesos productivos.

Lo que se ha producido es un aumento de la corrupción gracias a “regar la mermelada” y un festín desaforado en las regiones “beneficiadas”. Ahora son más los elefantes blancos o la comisión abierta de robos directos de regalías en todo el país. El actual Contralor General de la República con frecuencia señala cuantiosos  recursos “en alto riesgo de pérdida” provenientes de regalías; una verdad que pasa de soslayo es que el presupuesto nacional sigue sustituyendo recursos  de inversión de otras fuentes por regalías incorporando en las varias reformas al Sistema General de Regalías nuevas cargas como la financiación de la paz, por ejemplo, al igual que lo ambiental.

Como en toda fiesta, según la actual propaganda, nadie piensa que las regalías se acaban porque los combustibles fósiles se acaban  y que esto ocurrirá inevitablemente. Dada la poca importancia de las destinaciones, distantes del artículo 361 de la Constitución Nacional (desarrollo empresarial), ¿Qué pasará entonces? El 10% para Ciencia y Tecnología no se otorga con rigor.

Aquí, en nuestro departamento, en la pasada administración se otorgó un contrato por 21.000 millones de pesos para “apropiación social de la ciencia y Tecnología” que no ofrecía nada de ciencia y tecnología sino un ciclo de conferencias a las familias para que se familiarizaran con el concepto de la ciencia y tecnología. ¡Imagínense! Hoy el Huila es de los últimos departamentos en innovación y desarrollo empresarial según el índice de competitividad departamental de 2019.

Pero tenemos inversiones en materia social sin mirar su aporte al mejoramiento del nivel de vida de los huilenses. El interrogante es claro. ¿Qué tenemos programado para un resultado distinto?