La Nación
Sabia premonición 1 25 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Sabia premonición

Píter Bonilla Díaz

Lo que está ocurriendo con la mal llamada justicia en Colombia lo había anunciado el ilustre pensador, Álvaro Gómez Hurtado, mucho antes de que lo inmolaran, dentro de sus tantos pronunciamientos sobre el devenir de la república.

El último suceso presentado en la persona del expresidente Álvaro Uribe Vélez, y la diversidad de  casos, unos tras de otros, resulta el más acertado presagio del desaparecido líder de centro de derecha  cuando dijo, “Hemos llegado a una situación escandalosamente paradójica en la que nuestro sistema de justicia parece estarse pasando al bando de los criminales”. Lo que debe saber el sacrificado conductor conservador allá en la eternidad, es que la tal “justicia”, así entre comillas, ya está con ellos.

Lo curioso, que ha hecho se haga inexistente la capacidad de asombro, es que el exmandatario, de fallido denunciante pasa a ser acusado por el denunciado con efectivo propósito. Es decir, en términos coloquiales, ahora resulta “el cazador cazado”. No por la razón  que le pudo asistir al denunciado, sino por el encubrimiento  de sus conmilitones  magistrados  en relación con los delitos cometidos por el denunciado.

Las evidencias de que Iban Cepeda Castro iba a las cárceles a conseguir testigos falsos con ofertas de distinta índole para que declararan contra Uribe, están en las declaraciones de las personas que fueron objeto de tales ofrecimientos y que se han conocido por algunos noticieros de televisión, a excepción de CARACOL y las redes sociales. En cambio, sin que se le haya podido demostrar a Uribe Vélez  que cometió el delito que se le imputa, lo conminaron  con detención domiciliaria.

Si se  hace un breve repaso sobre la   actitud  sombría de la Corte en cuestión, basta recordar el caso de los computadores de alias “Raúl Reyes”, donde se ponía en evidencia la connivencia de Piedad Córdoba con las FARC, para ellos “Teodora Bolívar” y del mismísimo Cepeda, sin que su contenido fuera valorado por el alto tribunal (debiera llamársele enano) ante su contundencia. Y el penúltimo enojoso episodio de la permisividad con Santrich, en alianza con la JEP para que este  narcoterrorista  huyera, como igualmente sucedió con los también alias “Iván Márquez” y “Rumaña”.

No hay pues, la menor duda de que en gran parte el poder judicial tomó impulso para su perversa politización, desde su cúpula hacia abajo,  a partir del nefasto gobierno de Juan Manuel Santos. A él se le debe el auge del comunismo en el país, por supuesto a su hermano Enrique, como principal cerebro, y a los Samper Pizano.

Mirando  el panorama con objetividad y mucha calma, se pueden concluir dos cosas: Que las organizaciones guerrilleras, han hecho posible la elección de presidentes adversos a su vandalismo, con excepción de Santos,  quien les quiso entregar el país. Y con este último episodio nuevamente el que diga el victimizado senador Uribe. Se acordarán.

Que aliados con la ultra izquierda liderada por sus afines Gustavo Petro e Iván Cepeda, y la identidad política de la Corte de “mamertos”, tienen como objetivo imponer el régimen CastroChavista en Colombia. No hay duda entonces, que estas combinaciones partidistas tienen como rectora política a la Suprema para judicializar y privar de la libertad a quienes se  les opongan al peor estilo comunista que a diario vemos en Cuba y Venezuela, como acaba de suceder con  Álvaro Uribe.

La segunda es que, a propósito del expresidente, se vuelve a presentar igual fenómeno del antes anotado cuando se decía que el fundador del Centro Democrático y su Partido estaban en decadencia. Pues “los muertos que vois matais gozan de cabal salud”. La reacción de los colombianos fue inmediata en contra de la absurda y discriminatoria decisión de los políticos de la Corte fariana contra el exmandatario. Que sin medir sus  secuencias, olvidándose de los riesgos de la pandemia, salieron en caravana por distintas ciudades del país y lo continuarán haciendo no sé hasta cuándo.

Como no hay mal que por bien no venga, esto ha servido para que quienes no queremos la implantación del oprobioso sistema comunista en Colombia, levantemos la bandera republicana con  decidida energía y así frenar el avance de estos malpatriotas. Cercenar su pretensión de tomarse el poder para luego someter, sojuzgar y envilecer al enorme colectivo nacional que lo único que quiere es que prevalezca el entendimiento, la concordia y la seguridad ciudadana.

De otro lado, he aquí algunas de mis publicaciones por Facebook relacionadas con el tema que nos ocupa.

-o- Tiene huevo el procurador Carrillo al advertir que los funcionarios públicos, incluido el Presidente, tienen que acatar y no atacar los fallos de la justicia. ¡Cual justicia!

-o- Solo ocurre en Locombia, dirán en el exterior. Mientras que el presidente que combatió el terrorismo, dio seguridad democrática y de contera la reapertura de la inversión  social y extranjera, la Corte Suprema de Justicia le dicta detención domiciliaria, la cúpula terrorista disfruta de curules regaladas en el Congreso Nacional.

-o- Está claro. Para la justicia colombiana, en caso de ser denunciado, la mejor defensa es presentar el prontuario delictivo, para que de inmediato lo declaren inocente.

-o- Los cinco políticos de la Corte son los mismos que estudiarán la impugnación de la medida de aseguramiento contra Uribe. ¡Justicia ridícula!

-o- Presidente Duque. No más blandituras. Colombia no debe caer en las garras del comunismo. ¡Mano firme, corazón  grande!

-o- La extrema izquierda con sus distintos matices, conocidos como mamertos y farianos, tienen su propio Directorio Supremo Nacional. Funciona en las instalaciones de la Corte.

¡TERREMOTO  EN  COLOMBIA!

EPICENTRO : Corte de mamertofarianos.

INTENCIDAD : 5 magisgrados.

CONSECUENCIAS : Un herido y la destrucción jurídica del país.

-o- Si soy anti izquierdista y me procesan judicialmente siendo inocente, voy pa´la  cárcel. Si soy comunista con prontuario, sigo delinquiendo.

-o- Y se les cayó la máscara. La Corte se declara rectora política del comunismo en Colombia.

-o- El dolor une a la familia. La injusta decisión de la Corte Suprema contra el expresidente Álvaro Uribe, ocasionara la unidad y el fortalecimiento de su Partido.

-o- Corte de mamertos y farianos. Si quereis ver la apoteósica e inmensa solidaridad a favor de  Uribe, ¡ahí la teneis!

-o- Y la última del pasado jueves por la noche. El injustamente indiciado  exmandatario  a través de su apoderado Jaime Enrique Granados Peña, solicita a la Corte Suprema levante la reserva del proceso para que el país y los abogados especialistas conozcan el expediente.

¡Papa caliente para la injusticia!