A partir del primero de julio de 2012 todos los colombianos, sin importar el régimen al que estén afiliados, pueden acceder a un mismo Plan Obligatorio de Salud. A partir del primero de julio de 2012 todos los colombianos, sin importar el régimen al que estén afiliados, pueden acceder a un mismo Plan Obligatorio de Salud. El nuevo POS incluye un conjunto de acciones de prevención de la enfermedad y de recuperación de la salud desde la medicina preventiva hasta diversos tratamientos avanzados de todas y cualquiera de las enfermedades o condiciones que hacen necesaria la atención en salud. De ahora en adelante los beneficiarios tienen acceso a 5.874 actividades, procedimientos e intervenciones en salud y servicios hospitalarios, así como a 730 medicamentos para la atención de toda y cualquier condición de salud, enfermedad o patología para usuarios de todas las edades. Sin duda que el propósito del gobierno es loable. Sin embargo, en la práctica, no garantiza el acceso, oportunidad, continuidad e integralidad de los servicios. Tampoco los recursos económicos que se requieren para asegurar una atención adecuada en términos de oportunidad, calidad y eficacia. Pese a los beneficios y grandes propósitos tendrá impactos de grandes dimensiones que pueden hacer colapsar la red pública hospitalaria si no se toman las medidas de fondo requeridas para la solución de la crisis actual de la salud. La unificación del POS incrementará la cartera vencida que mantienen las EPS con las IPS (públicas y privadas) y con seguridad, aumentarán también las barreras de acceso a los servicios de salud. No hay garantías para que las EPS paguen a tiempo sus obligaciones. La cartera en el Huila alcanza los 84.000 millones, de los 17.000 millones son superiores a los 360 días. No hay derecho. Si bien es cierto que el nuevo POS es un gran avance en la ampliación de medicamentos, insumos y procedimientos médicos, el acceso efectivo a los mismos sigue siendo el cuello de botella. En su mayoría ya no están relacionados con medicamentos, procedimientos o insumos, sino a trámites administrativos y otras barreras de acceso. Y a esto súmele las limitaciones a las que se son sometidos los médicos tratantes, quienes afectados por las formas de contratación entre aseguradores y prestadores de servicios de salud, se ven presionados en la prescripción de los tratamientos requeridos por los pacientes. Si bien el POS se actualiza e incluye nuevas tecnologías, el acceso a estas nuevas tecnologías es limitada, en virtud de las barreras y trabas administrativas con las que se pretende dilatar o negar la prestación del servicio, evitándose con ello la afectación de la Unidad de Pago por Capitación (UPC) y con ello otorgándoles mayor rentabilidad financiera a los intermediarios del sistema, aseguradores o prestadores de servicios de salud, los grandes beneficiarios. Ante estas limitaciones muchos pacientes recurren a las acciones de tutela para que les presten los servicios. Otros han fallecido en las puertas de las entidades asistenciales por falta de una atención oportuna, como ha ocurrido. En el Huila en los primeros seis meses se han colocado 268 tutelas, 104 de ellas contra Comfamiliar, lo que refleja la magnitud del fenómeno. Por eso la voz de alarma que lanzó esta semana la Secretaria de Salud Emma Constanza Sastoque. La unificación es positiva, pero de ahí a garantizar la atención adecuada hay mucho trecho. El país sigue esperando una gran reforma a la salud que garantice el acceso y la calidad de los servicios. DESTACADO “Si bien es cierto que el nuevo POS es un gran avance en la ampliación de medicamentos, insumos y procedimientos médicos, el acceso efectivo a los mismos sigue siendo el cuello de botella”. Editorialito La Bienal de Novela ‘José Eustasio Rivera’ convocada por la Fundación Tierra de Promisión, tuvo una acogida en esta fase de internacionalización, un gran esfuerzo liderado por el ex ministro Guillermo Plazas.