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¡San Pedro se lo llevó! 1 28 marzo, 2024
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¡San Pedro se lo llevó!

A Liberio Trujillo, ‘Volate’, San Pedro se lo llevó. El carnicero de 59 años de edad, humilde, trabajador y servicial, falleció luego de pasar 16 días tomando aguardiente puro durante las fiestas sampedrinas de su natal Palermo; a fondo blanco y con sus amigos, como siempre lo disfrutó. ¡San Pedro se lo llevó! A Liberio Trujillo, ‘Volate’, San Pedro se lo llevó. El carnicero de 59 años de edad, humilde, trabajador y servicial, falleció luego de pasar 16 días tomando aguardiente puro durante las fiestas sampedrinas de su natal Palermo; a fondo blanco y con sus amigos, como siempre lo disfrutó. GINNA TATIANA PIRAGAUTA G. LA NACIÓN, NEIVA Los últimos 16 días de su vida los pasó Liberio Trujillo con sus amigos tomando Aguardiente Doble Anís puro, lo único que bebía como palermuno recio y huilense de tradición, en las festividades sampedrinas. ‘Volate’, el carnicero estruendoso y servicial de la plaza de mercado de Palermo, partió a la eternidad el lunes pasado en el ocaso de las festividades sampedrinas, las que siempre se gozó a fondo blanco. Nacido y criado en una familia campesina y trabajadora del norte del Huila, conocida en el pueblo porque los varones fueron muy resistentes para tomar, falleció en su casa; en su silla mecedora, en silencio y sin quejas, como siempre quiso que fuera. “Era una persona muy noble, nunca le negaba un favor a nadie. Si no tenía cómo, buscaba los recursos para colaborar. A veces era cariñoso. Le gustaba mucho el trago y las fiestas. La gente lo quería mucho porque era solidario”, recordó su nieta mayor. Liberio Trujillo conformó su hogar con Beatriz Vargas Perdomo hace 38 años. Con ella, su compañera fiel, tuvo seis hijos. La mayor fue Floreyi, seguida de Viviana, Alexander, Wilber, Adriana y Miladi, quienes le regalaron 11 nietos, su mayor alegría. “Fue más consentidor con los nietos que con los hijos. Con ellos era muy cariñoso y no le gustaba que los dejaran llorar”, recordó su esposa mientras preparaba el almuerzo para los familiares y amigos que los acompañaron durante el sepelio. Floreyi aseguró que su padre siempre fue un hombre reservado. “Tal vez sintió dolor cuando estaba en la mecedora, la noche que falleció, y no nos avisó porque pensó que lo íbamos a regañar porque el médico le había dicho que no podía tomar. O tal vez fue una muerte repentina. Sin embargo, en su rostro no quedó muestra de dolor”, manifestó su hija. Partida Liberio no era muy buen bailarín, le gustaba más sentarse con sus amigos a tomar Doble Anís en las festividades. Por eso, el lunes pasado la gente del pueblo se asombró de verlo bailar en el parque. “Bailó bambucos y sanjuaneros hasta música moderna”, recordó su hija. Esa noche estuvo tomando aguardiente con un amigo hasta las 8:30 p.m. Cuando llegó a su casa se tomó una jarra completa de jugo. Hacía días que no probaba bocado. Luego se recostó en la silla. Como a las 12.00 p.m. salió hasta la esquina, dio una vuelta y volvió a sentarse. En la madrugada, una de las hijas lo escuchó meciéndose fuertemente en la silla de mimbre azul, típica de las familias campesinas de la región. La joven se levantó y le preguntó si estaba bien. Él no le respondió nada, pero en silencio se pegaba muy duro en el estómago. A las 5:00 a.m. le ofrecieron un tinto. Fue en ese momento que sus familiares se percataron del fallecimiento. La silla estaba quieta, ‘Volate’ frío y morado. San Pedro se lo llevó después de gozarse un largo carnaval. Liberio Trujillo resistió hasta que el festival terminó. “Él esperaba a que llegara el San Pedro, porque bebía más de 15 días seguidos. En estas fiestas arrancó a tomar desde finales de mayo. A mediados de junio descansó ocho días y siguió tomando hasta el lunes pasado”, dijo su hijo. Recuerdos Algunos matarifes de Palermo, compañeros de labores y de tragos durante más de 30 años, aseguraron que ‘Volate’ fue un hombre trabajador y correcto, como buen huilense. “A todos los hijos los apoyó económicamente mientras pudo. Levantó la casa en el barrio Santa Rosalía con el trabajo de la carnicería y el apoyo de su esposa, quien trabajó con él hombro a hombro. Fue matarife toda la vida. Sus hijos también le ayudaban en el puesto”, manifestaron. “Anteriormente, la galería le pertenecía a la Alcaldía y ellos allá tenían su puesto. Con los compañeros de trabajo fundaron la cooperativa. Trabajaba sin descanso. Fueron los fundadores de las carnicerías en Palermo”, dijeron sus familiares. “Era muy alegre y bondadoso con la gente. Si estaba tomando le decía a uno, ‘caminé que yo pago’. Le gustaba compartir, tomar y reír; era algo que le nacía. Estaba pendiente de sus amigos y ayudaba a quien podía”, recordó un anciano amigo, camino al cementerio central del municipio, en donde fue enterrado luego de una concurrida ceremonia religiosa. “Le gustaba escuchar rancheras y conversar con los amigos. Era una persona trabajadora, criado a la antigua, como nuestros padres, campesinos amantes del trabajo”, expresó un compañero de trabajo, quien asistió al funeral en compañía de todos los matarifes del municipio. “Tomé bastante trago con él y aguantaba muchos días, pero tenía una debilidad: no comía cuando bebía. Yo también puedo pasar muchos días bebiendo, pero al cuerpo hay que darle comida. Eso fue lo que le falló”, aseguró un amigo, bastante afectado por la inesperada pérdida de su compañero de fiestas. “Era muy querendón de sus hijos. Afortunadamente ya todos están grandes, trabajan y producen para sus gastos. La esposa es una señora muy trabajadora, metida en el negocio con él. Él me decía que la quería mucho porque era una buena mujer. Ella lo molestaba porque él se tomaba los tragos, como todas las esposas”, recordó con tristeza él ultimo compañero de faenas con quien compartió ‘Volate’. “Era un gran personaje, dejó muchas historias. Ayudó al que pudo y nunca le hizo mal a nadie. Fue un enamorado de las mujeres, aunque su único amor fue su esposa, y el Doble Anís puro. No respondió más el viejo Liberio, se ha ido. No sufrió. Tuvo una muerte digna, en su ley. Cuando tomaba siempre pregonaba que a la muerte no se le temía, que había que enfrentarla. Murió en su salsa”, expresó con nostalgia un sexagenario compañero de cantinas, mientras observaba a lo lejos, el féretro de su amigo, al que San Pedro se llevó a parrandear al cielo, con su paisana María Valbuena a ritmo de sanjuaneros. ¡San Pedro se lo llevó! 7 28 marzo, 2024 Liberio Trujillo, ‘Volate’ el día de sus cumpleaños junto a su nieta. ¡San Pedro se lo llevó! 8 28 marzo, 2024 Liberio Trujillo compartió 38 años de su vida junto a su esposa Beatriz Vargas Perdomo. ¡San Pedro se lo llevó! 9 28 marzo, 2024 ‘Volate’ en sus años de juventud, jugó al fútbol con sus amigos. En este partido metió un gol y lo celebró durante ocho días tomando. ¡San Pedro se lo llevó! 10 28 marzo, 2024 En esta silla mecedora murió ‘Volate’, sin quejas y en silencio. ¡San Pedro se lo llevó! 11 28 marzo, 2024 Amigos y familiares le dieron el último adiós a ‘Volate’. 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