La Nación
¿Se debilita apoyo al gobierno? 1 28 marzo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

¿Se debilita apoyo al gobierno?

Por: Cecilia López Montaño

Para muchos han sido una sorpresa dos artículos editoriales de columnistas muy afines al gobierno, que sugieren cambios o abiertamente plantean críticas a políticas de la administración Duque. Se trata de las columnas del domingo anterior en El Tiempo de María Isabel Rueda y de Mauricio Vargas. Mientras la Canciller Claudia Blum —que no logra ubicarse— ratifica que la prioridad es insistir en la salida de Maduro, María Isabel titula su columna ‘Repensar la Diplomacia” en la cual critica claramente el aislamiento del gobierno colombiano con Venezuela al no dejar ningún canal de comunicación, algo que ni siquiera Estados Unidos ha hecho. Le dice al gobierno que no puede seguir con la misma estrategia diplomática que no ha logrado ninguno de los objetivos planteados. Como esta es una de sus políticas más criticadas no solo por su actuación con Venezuela sino por ejemplo con Cuba, además de los malos nombramientos en embajadas y consulados, ojalá que estas críticas que vienen de quien ha apoyado al gobierno, logren lo que la oposición no ha podido.

A su vez Mauricio Vargas titula su artículo “No Maten a Uber” y de manera contundente califica como un profundo error del gobierno la decisión que termina con la salida de este sistema de transporte que además señala como contraproducente porque “traiciona su filosofía”, que se supone apoya este tipo de desarrollos tecnológicos. Es decir la cacareada economía naranja. Lo que más sorprende de esta columna es que Vargas afirma que “Prohibir Uber porque los taxistas lo consideran competencia equivale a prohibir las páginas web de noticias porque compiten con los medios de comunicación tradicionales, o prohibir las páginas web de pasajes y turismo porque compiten con las agencias de viajes”.

Resulta muy interesante que las críticas a decisiones equivocadas de la actual administración no solo provengan de quienes se descalifican como parte de la oposición. Esto quiere decir que el gobierno se está equivocando en materia grave en temas sustantivos: la diplomacia y desarrollos basados en avances tecnológicos por razones que no satisfacen ni siquiera a quienes siempre le dan al gobierno por lo menos el beneficio de la duda.

Es el momento para que el gobierno reflexione seriamente sobre la forma como está conduciendo al país y se aísle de quienes lo rodean y suelen explicar las divergencias solo por razones políticas. Si a estos y otros errores se suma la crisis de seguridad que afecta a varias regiones del país y las manifestaciones de insatisfacción de la población, es evidente que el gobierno debe autoanalizarse y redireccionar el rumbo de sus políticas más importantes. Su baja popularidad puede llegar al piso si siguen creyendo que solo se trata de mejorar la forma de comunicar su gestión.

El problema va mucho más allá.
Son demasiado problemas juntos que ya son innegables para gran parte del país. Cuando esto sucede el presidente y su equipo deben aceptar que están en una situación que requiere no ignorar las grandes fallas. La verdad es que estas columnas mencionadas demuestran que se está diluyendo el apoyo al gobierno que ya de por sí es muy precario.