La Universidad Surcolombiana firmó ayer un acuerdo de matrícula cero con el Gobierno Nacional. La iniciativa beneficiará a la totalidad de los estudiantes de pregrado de los estratos 1, 2 y 3 de esta casa de estudios hasta el segundo semestre de 2022.
Alrededor de 12.000 estudiantes de la Usco que equivalen al 99% de los universitarios de este claustro académico, se beneficiarán con el acuerdo firmado ayer en Neiva entre la Universidad Surcolombiana y el Gobierno Nacional.
Y es que las partes suscribieron el memorando de intención para avanzar en la gratuidad total de la matrícula de los estudiantes de pregrado de los estratos 1, 2 y 3 de esta casa de estudios durante el segundo semestre académico de 2021 y los dos de 2022.
El acuerdo, que apunta a formalizar la matrícula cero para favorecer a los estudiantes de la Usco pertenecientes a los estratos referidos, fue firmado por el rector (e) Eduardo Pastrana Bonilla, quien, durante su intervención en el evento protocolario, pidió que los recursos por este concepto sean girados lo más ágilmente posible para que la vida universitaria no se vea afectada.
En representación del Gobierno Nacional estuvo el presidente del Icetex, Manuel Acevedo Jaramillo, entidad que, como administradora de los fondos para el acceso y la permanencia a la educación superior, pone a disposición su capacidad operativa para el desarrollo de esta estrategia que se llevará a cabo en las 63 Instituciones de Educación Superior Públicas del país.
Según lo firmado, el Ministerio de Educación se compromete a avanzar en la gradualidad de la gratuidad para estudiantes de estratos 1, 2 y 3 de la Universidad Surcolombiana a través de programas para el acceso y permanencia como Generación E, e iniciativas como el Fondo Solidario para la Educación, así como coordinar y gestionar la concurrencia de actores y recursos nacionales y locales, públicos y privados, que se puedan sumar a esta iniciativa.
El rector de la Usco destacó que con esto se beneficiarán el 99% de los universitarios de este claustro académico, es decir, unos 12.000 estudiantes de pregrado cuyas matrículas sumarían más o menos $9.000 millones, los cuales provendrían, precisamente, del Fondo de Solidaridad Educativa del Ministerio de Educación Nacional, y donde también concurrirían el Departamento del Huila y los municipios que así lo decidan.
Sin embargo, luego de destacar el interés manifiesto del Departamento del Huila de participar en esta estrategia de matrícula cero nuevamente, el Rector indicó que lo que se busca es que el flujo de recursos sea ágil porque, aunque este ingreso llegaría a las arcas de la Universidad, lo haría de manera diferida.
“A nosotros los recursos nos están llegando tiempo después de iniciado el semestre, y eso nos afecta el andamiaje administrativo, por eso hicimos el llamado a que el desembolso de recursos sea lo más ágil posible para que no se afecte la vida universitaria”, enfatizó Pastrana Bonilla.
Usco pide retomar clases
De otro lado, el Consejo Académico de la Universidad Surcolombiana pidió a sus estudiantes y docentes retomar las actividades académicas y, de forma concertada, hacer los ajustes metodológicos que se requieran para completar al menos el 80% de los propósitos de formación en el tiempo que resta para culminar el primer periodo académico de 2021.
Según el comunicado firmado por el rector (e), Eduardo Pastrana Bonilla, y el secretario general, Alberto Polanía Puentes, la solicitud se hace ante la imposibilidad presupuestal de la Institución de cumplir con el calendario académico aprobado si se suspende y, en consecuencia, se prolongaría en el tiempo el actual primer periodo académico.
Agrega que esto no solo se daría por la imposibilidad de ampliar contrataciones y mantener las obligaciones contractuales vigentes, “sino, porque no habría segundo periodo académico y en consecuencia no se recibirían del Gobierno Nacional los recursos de funcionamiento de la Institución, incluyendo los de matrícula cero para los estudiantes”.
Precisa el comunicado que se hace necesario, para minimizar los impactos legales, financieros y académicos, cancelar los cursos o actividades académicas en los cuales no se complete al menos el 80% de los propósitos de formación previstos en el microdiseño, en el tiempo restante del calendario académico para el primer periodo académico.