FERNANDO POLO/LN
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El Consorcio Aliadas para el Progreso, encargado de la construcción de la autopista Santana-Mocoa-Neiva, salió a desmentir al secretario de Vías e Infraestructura del Huila, Henry Liscano, quien luego de una reunión llevada a cabo la semana anterior, salió a decir que Aliadas estaba quebrada y les tocaba caducar el contrato de la vía 4G.
En anuncio del Secretario de Vías despertó la inquietud entre la comunidad de los departamentos del Huila y Putumayo, que están a la espera que compañía Aliadas defina su situación financiera para que inicie los trabajos de construcción de la vía. Y que les solucione el problema del paso por Pericongo, donde cada vez que llueve cierran la carretera causándole un gran perjuicio a toda la zona del surcolombiano.
No obstante, el viernes anterior por medio de un comunicado Aliadas dejó claro que no están en quiebra, pero tampoco tienen el músculo financiero para sacar adelante el proyecto.
“Frente a los pronunciamientos hechos por el Secretario de Vías e Infraestructura del Departamento del Huila, en los cuales se refirió a la supuesta quiebra de Aliadas para el Progreso S.A.S. y posterior entrega del contrato de concesión a la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, la concesionaria Aliadas para el Progreso informa a la ciudadanía que por parte de la organización no se ha emitido ningún pronunciamiento que vengan de la vocería oficial con respecto a la figura de quiebra o de una posible caducidad del contrato”, aclaró el concesionario.
Las voces encontradas entre Aliadas y el secretario de Vías, Henry Liscano, despertaron la inquietud del Comité de Veeduría de Obras Viales del Huila, que se reunió y propuso que es necesario organizar una gran reunión en Neiva con la presencia de la ministra de Transporte, Ángela María Orozco, de la Agencia Nacional de Infraestructura ANI, de Invías, de los congresistas y gobernadores de los departamentos de Huila, Caquetá, Putumayo y Cauca y de toda la dirigencia de los cuatro departamentos para que de una vez por todas definan qué va a pasar con el proyecto de la vía Santana-Mocoa-Neiva.
A la reunión asistieron líderes de Neiva, Algeciras, del Occidente del Huila y el presidente de la Asamblea Departamental, quien confirmó que efectivamente desde la Secretaría de Vías lo que se dijo fue que Aliadas ya no continuaría con el proyecto.
“El secretario de Vías Henry Liscano me dijo que la empresa se había declarado en quiebra, por lo que quedaban dos opciones, una es que declaren la caducidad de contrato, la otra que le cedan el contrato a una empresa francesa que está interesa en seguir con el proyecto, eso es lo que queremos que se defina en una gran reunión en la que participen todos. Que el Gobierno Nacional demuestre voluntad en la solución de este problema que está afectando a todo el sur de Colombia”, dijo el presidente de la Asamblea Departamental, Julio Díaz.
Según se conoció, la empresa francesa que está interesada en asumir el proyecto de la vía 4G, si tiene el músculo financiero para empezar con los trabajos, pero están parados porque Aliadas tiene varios problemas jurídicos que el nuevo contratista no quiere heredar, ese sería el único inconveniente que ha impedido la negociación.
En la reunión los veedores denunciaron que entre Aliadas y el Gobierno Nacional “se tiran la pelota” y ninguno da una respuesta acertada sobre lo que le espera al proyecto.
“El Gobierno Nacional se escuda en que la obra está concesionada y por eso no puede disponer de recursos, Aliadas dice que no tiene plata, mientras tanto los usuarios de la vía siguen esperando hasta una hora que les den paso en el sector de Pericongo, donde desde hace varios meses se está derrumbando la montaña y hundiéndose la banca de la carretera”, anotó Díaz.
A SOSTENER LOS RECURSOS
El Gobierno Nacional desde hace tres años que inicio el proyecto destinó 1.3 billones de pesos para la obra 4G Santana-Mocoa-Neiva, el temor que tiene la dirigencia huilense y los veedores, es que con la falta de dinero que tiene el Gobierno, esos recursos terminen en las arcas de otros proyectos, y el Huila se quede sin autopista mientras sigue esperando que se defina el litigio de Aliadas.
Asimismo, el presidente del comité de veedurías, Luis Alfredo Gómez, señaló que ya se cumplieron tres años de la adjudicación del contrato a una compañía que hoy está desfinanciada y no encuentra apoyo de los bancos para continuar con el proyecto.
“Lo que se debe hacer es que Aliadas ceda la concesión a la empresa francesa, pero como la concesión está multada no se ha podido llegar a ningún acuerdo. Por ello estamos promoviendo una gran reunión con presencia del Ministerio de Transporte, la ANI, todo la clase política y gobernantes de los cuatro departamentos que se están perjudicando con la demora del proyecto”, sostuvo Luis Alfredo Gómez.
Agregó que el proyecto de la autopista ya tiene algunos avances, como los estudios y diseños, varios predios ya se compraron y se ha avanzado en el tema de conciliaciones en lo ambiental.
¿Y LOS PEAJES?
Actualmente la concesión es la encargada de recolectar los dineros de los peajes Los Cauchos y Altamira, cuyo tramo está en pésimas condiciones. Pero los dineros llegan a una fiducia que maneja la ANI, por lo que Aliadas no puede disponer de ellos.
Mientras la plata está guardada, los usuarios de la vía imploran para que les solucione el problema en Pericongo, que tiene devastada la economía de los departamentos de Putumayo y Huila.
Como la concesión no hace nada para solucionar el problema, los diputados y el gobernador lograron conseguir $20.000 millones que están siendo invertidos en la vía La Guaira – Naranjal – Sicana – Timaná, que esel paso alterno cuando se cierra la vía por Pericongo.