CAROLINA ARGÜELLO CRUZ/LN
LA NACIÓN recorrió la capital del Huila y encontró varios lugares públicos ‘apoderados’ no sólo por vendedores ambulantes sino por establecimientos comerciales formales.
Las motocicletas que se parquean en lugares prohibidos, en los talleres de la carrera cuarta, ocasionando en muchas ocasiones que el tránsito colapse en algunas calles de la ciudad.
El despliegue de los tendales del microcentro de Neiva, específicamente con la calle octava entre carreras tercera y cuarta, también es el común de los vendedores para mostrar sus productos.
En la carrera Quinta, se instalan casetas improvisadas donde se ofrece comidas y bebidas en el espacio público destinado para el peatón.
En la carrera Quinta entre calles 14 y 15, almacenes y restaurantes sacan al pasaje peatonal sillas, mesas, y algunas de las motos que ofertan.