Un fuerte trancón a lado y lado de la vía en el sector de La Jagua se registró ayer después del mediodía, lo que originó la inconformidad de pasajeros, transportadores y gente del común, que en plena temporada decembrina han tenido que afrontar los daños permanentes en la vía. LA NACIÓN, GARZÓN Un fuerte trancón a lado y lado de la vía en el sector de La Jagua se registró ayer después del mediodía, lo que originó la inconformidad de pasajeros, transportadores y gente del común, que en plena temporada decembrina han tenido que afrontar los daños permanentes en la vía. Miembros de la concesión encargada de mantener el pavimento y toda la estructura de la carretera hicieron presencia en la zona, para verificar el daño y con maquinaria pesada entrar a resolver la situación que fue inquietante durante gran parte del día. “Lo que pasa es que en este sector hay muchos desperfectos sobre el pavimento, la caída de rocas, tierra y otros elementos han ayudado a destruir la vía y ello ha obligado a enviar maquinaria”, dijo el dirigente Mauricio Téllez. El deslizamiento se sumó a los daños en la vía Florencia-Suaza, que ha prolongado la demora de los viajeros que salen de Garzón hacia la capital caqueteña, obstaculizando el normal desarrollo de la movilidad, que aunque ha tenido un aumento notorio en el transporte de pasajeros en diciembre, estos daños causan muchos inconvenientes. La reparación de la vía después de Garzón hacia el municipio de Altamira se va a mantener, dado que es este uno de los tramos con mayor afectación en la zona centro y sur del departamento, sumado al aumento de vehículos pesados que vienen del Putumayo y del Caquetá con petróleo, que incrementan por supuesto el daño y deterioro permanente de la carretera. Un trancón de varias horas tuvieron que soportar los viajeros por daños en la vía Garzón-Altamira.