Eduardo Gutiérrez Arias
Después de la captura por de los 9 concejales, el Contralor y la Personera de Neiva, investigados por haber negociado con puestos, contratos y dinero, su elección, la crisis de credibilidad de los neivanos en su dirigencia política y especialmente en los partidos que han gobernado la ciudad en los últimos tiempos, es tan grande que no va a ser fácil para cualquier dirigente convencer a los ciudadanos a votar por él para la alcaldía. Pero esta es una ciudad de alto civismo que necesita recuperarse de este trauma.
El nivel de civismo de los neivanos se vio reflejado en la pasada consulta anticorrupción del 26 de agosto, en la que votaron 103.000 personas correspondiente al 39% del potencial votante (estimado para Neiva en 262.000), sin ningún tipo de estímulo material (sin tamales, sin transporte, sin compra de votos, sin publicidad, sin ningún aliciente para el elector diferente a buscar la pulcritud en la administración pública y con la convocatoria negativa de una buena parte de los líderes de la derecha). Un municipio con este tipo de ciudadanos cada más cultos y conscientes de sus responsabilidades políticas para la construcción de un poder local transparente, democrático y progresista, difícilmente votará por gamonales y élites contaminadas por la politiquería, la corrupción y el manzanillismo. Demandará líderes con reconocida experticia administrativa, que hayan tenido una vida pública signada por la honradez, con adecuada formación académica y que hayan mostrado su compromiso con la democracia en temas como el respeto al pluralismo ideológico, la búsqueda de la equidad social y compromiso con el progresos económico y social.
Resulta que en Neiva tenemos tres profesionales que reúnen estos requisitos, que son mencionados como eventuales candidatos a la alcaldía de la ciudad, con un pensamiento ideológico moderno y afín entre ellos, que les permitiría llegar a acuerdos para desarrollar una campaña a la alcaldía unitaria en la que en el curso de unos 6 meses (de octubre de 2018 a abril de 2019) recorran el municipio (comunas y corregimientos), se reúnen con gremios, universidades, colegios, estamentos sociales, empresas públicas y privadas, que les permita unificar ideas para un programa o plataforma política para el desarrollo de la localidad, y que luego, en una consulta interpartidista organizada por la registraduría, definan que aquel de los tres que resulte con mayor respaldo electoral, sea el candidato único a la alcaldía de Neiva, por un Frente Amplio Democrático. Los tres nombres a que hago alusión son MARIA DEL CARMEN JIMENEZ, MATEO TRUJILLO Y DILBERTO TRUJILLO.