Cuatro días después del sismo que dejó 460 muertos, un nuevo temblor golpeó la isla e Indonesia.
Sin dar una cifra específica, el portavoz de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNPB), Sutopo Purwo Nugroho, informó que “varias” personas murieron después de que un terremoto de magnitud 7,5 sacudió el norte de la isla indonesia de Célebes y provocó un tsunami de hasta dos metros que golpeó las ciudades de Palu y Donggala.
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“Informes sobre el terreno indican que varias víctimas murieron por el colapso de edificios. El tsunami también golpeó varios asentamientos y edificios en la playa”, dijo Sutopo en un comunicado. Por su parte, el director del centro de tsunamis y terremotos de la Agencia de Climatología, Meteorología y Geofísica (BMKG), Rahmat Triyono, dijo al medio local ‘Kompas’ que las olas alcanzaron entre un metro y medio y dos metros. Una grabación de video realizada desde lo alto de una rampa de un parqueadero en Palu, una ciudad de 350.000 habitantes situada a unos 80 km del epicentro del terremoto, mostraba cómo una ola de embravecidas aguas arrasaba varios edificios e inundaba una gran mezquita.
Rahmat Triyono confirmó que la ciudad había sido golpeada por una enorme ola. Varias personas que viven a cientos de kilómetros del epicentro afirmaron haber sentido el fuerte temblor, horas después de otra sacudida más pequeña que mató a una persona en la misma zona de este archipiélago del Sudeste asiático. De momento no había informaciones sobre muertos o heridos tras el último temblor, pero fue de mayor magnitud que la serie de terremotos que causaron este mismo año cientos de muertos en la isla de Lombok.
El terremoto se registró a una profundidad de 10 kilómetros en el centro de Sulawesi, anunció el Instituto Geológico de Estados Unidos (USGS).
“Los habitantes entraron en pánico y salieron corriendo de sus hogares”, dijo Rahmat Triyono. Según el vocero, se enviaron equipos de búsqueda y rescate a las zonas más afectadas. El principal aeropuerto de Palu se cerró minutos después y se mantendrá clausurado durante 24 horas, de acuerdo con las autoridades.