La Nación
Un año de decisiones 1 28 marzo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Un año de decisiones

FLORA PERDOMO ANDRADE

El año 2022, tendrá en el primer semestre la definición del nuevo mapa político del país. En marzo las elecciones de Congreso, en las que espero revalidar con el apoyo de miles de huilenses mi credencial de congresista y en mayo el proceso electoral presidencial, del que dependerá en buena parte el futuro de todos los colombianos.
Sin lugar a dudas vivimos un momento coyuntural, la gente reclama cambios, hay un creciente inconformismo ciudadano por cuenta de las decisiones de los gobernantes que en la mayoría de las ocasiones van en contravía de lo que las comunidades esperan y por ello, el reto de quienes buscamos seguir contando con el favor popular es demostrar que en medio de esas consideraciones hemos cumplido, tenemos un trabajo y resultados desde lo legislativo y en la gestión en representación de toda una región.
Más allá de las consideraciones personales, debo decir que no han sido años fáciles para los colombianos. La pandemia afectó y generó serias dificultades en lo económico y social, de eso no hay duda. Se perdieron empleos, la gente redujo significativamente sus ingresos y se evidenció, como lo señala la ONU un empobrecimiento de la población: muchas familias ya no cuentan con sus tres alimentos al día; además se percibe la pérdida del poder adquisitivo del dinero, produciendo que la gente todos los días sus recursos económicos resulten menos rendidores para satisfacer sus necesidades básicas, pero pese a todo ello, no podemos llenarnos de desesperanza y por el contrario, nuestro propósito es que miremos el futuro con optimismo; hay una serie de factores que hacen que este nuevo año esté cargado de esperanza, de cambio y de mucha ilusión por un futuro mejor.
Debo hacer un llamado a la unidad familiar. En estos momentos de complejidad social, es el seno del hogar el soporte para hacerle frente a las dificultades. Hay que abrirle la puerta al diálogo, a la solución de conflictos de manera pacífica; se requiere una mayor conciencia para evitar que las familias se desintegren; las cifras presentadas por bienestar Familiar reflejan graves situaciones de violencia doméstica, así como el aumento de las solicitudes de separación en más de un 40 por ciento, lo que muestra la crisis de los hogares y en ese orden de ideas, una afectación clara y directa para niños y adolescentes.
He decidido por respeto a los lectores de este medio de comunicación, suspender mi columna de opinión que venimos publicando de manera quincenal durante los últimos cinco años, lo hago agradeciendo a las directivas en cabeza del señor Jesús Oviedo, por la posibilidad de permitirnos comunicar y expresar ideas; nos corresponde ahora enfocar los esfuerzos, concentrar las tareas en el ejercicio propio de la dinámica de una campaña que se tornará intensa y en la que hará falta tiempo para dedicarle a la escritura con rigor, como lo exige este espacio.
Me resta dar las gracias a todas las personas que cada quince días, se tomaron parte de su tiempo para leer y comentar estas columnas, algo que considero importante y fundamental y que nos ayudó para poder comprender las diversas realidades de las comunidades de nuestra comarca.
Este es el año de las decisiones. Les deseo que todas las metas y sueños trazados los puedan cumplir. No tengo dudas de que mejores momentos están por venir.
¡Un gran año para todos!