Eduardo Gutiérrez Arias
A quince días del triunfo electoral de Gustavo Petro, el ambiente político del país es de optimismo y todo indica que su gobernabilidad será muy alta, por lo menos en el primer año de gobierno. Al día siguiente de las elecciones, el Partido Liberal con Cesar Gaviria a la cabeza, se declaró como Partido de Gobierno, con el claro anuncio que apoyarán todas las reformas que el candidato propuso durante su campaña. En el mismo sentido se pronunciaron pocos días después, los parlamentarios del Partido Conservador, contrariando el criterio de su presidente Omar Yepes, quien les había pedido declarar la oposición, provocando su renuncia al cargo. También expresaron su apoyo al nuevo gobierno los parlamentarios verdes y el partido de la U. De esta manera el nuevo mandatario cuenta con las mayorías suficientes para aprobar en el Congreso los proyectos de ley más importantes de su gobierno como el Plan de Desarrollo y reformas esenciales en los sectores agrario, educativo, de salud, pensional, el tránsito hacia la descarbonización de la economía con fuentes de energía limpias y la protección del medio ambiente.
A esta distensión del polarizado clima político contribuyeron las reuniones del nuevo presidente con su contendor de la segunda vuelta, Rodolfo Hernández, y con Álvaro Uribe. Petro ha comenzado a demostrar que la izquierda en el poder si respetará los derechos de la oposición y no les dará a sus adversarios el trato de enemigos, terroristas y delincuentes, que ella recibió cuando desde la legalidad hizo oposición. El cambio ha comenzado cuando aún falta un poco más de un mes para la posesión del nuevo mandatario. Otros factores de tranquilidad para una derecha que nunca había visto gobernar a la izquierda y amenazaba con toda suerte de calamidades (que el precio del dólar se iba a disparar, que los ricos se irían del país con su dinero, que vendría la recesión, etc.) son los anuncios de quienes integrarán algunos de los cargos claves en el nuevo gobierno: José Antonio Ocampo en el ministerio de hacienda, con amplio reconocimiento como economista y buen desempeño como ministro en anteriores gobiernos, el conservador progresista y promotor de la paz, Álvaro Leiva Durán como canciller, y Roy Barreras postulado a dirigir el Senado, como garantía de los derechos de todos los partidos y movimientos políticos que tienes asiendo en esta corporación .
No todo será color de rosas. Habrá momentos de dificultades y tensión política cuando los cambios comiencen a pisar los callos de algunos privilegiados que quisieran mantener el statu quo a cualquier precio. Pero las mayorías nacionales que se expresaron en estas elecciones, podrán defender su mandato y su gobierno, con apego a la Constitución y la ley.