Sin la asistencia de los fieles en las iglesias, pero con la fe más viva que nunca, así se celebró el tradicional Domingo de Ramos en Neiva y en algunos municipios del Huila.
Hace un año o menos, nadie imaginó que la Semana Santa del 2020 debiera celebrarse de una manera diferente a la comúnmente acostumbrada. Durante esta época del año en la que los fieles católicos celebran la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén en el tradicional Domingo de Ramos las iglesias están a reventar con cantos y alabanzas.
Sin embargo, este año los templos no abrieron sus puertas como consecuencia de la pandemia del coronavirus que tiene azotada a la humanidad.
Transmisiones en vivo a través de la red social de Facebook fueron el canal de comunicación entre la iglesia y los creyentes. Diferentes parroquias del mundo, de Colombia y del Huila hicieron lo propio para no dejar morir esta emotiva eucaristía.
De hecho, el Papa Francisco hizo lo mismo desde la Capilla de San Pedro en el Vaticano.
La mayoría de los templos fueron arreglados con ramos, lo mismo hicieron algunas de las familias, que colocaron frente a sus casas un adorno pequeño, pero con un significado gigante. La gran mayoría con la misma plegaria: que se acabe toda esta tempestad que tiene al planeta en medio de la incertidumbre y el miedo.