La Nación
Una jugada de más en la moción de censura 1 29 marzo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Una jugada de más en la moción de censura

Rodrigo Villalba Mosquera

 

La moción de censura está prevista en la Carta Política en su artículo 135 y en la Ley 5 de 1992 reglamento del Congreso, para altos funcionarios del Estado (ministros …) sean sujetos de esta, con la consecuencia de que si esta figura prospera puedan ser separados del cargo. Debe ser promovida por lo menos por el 10% de los integrantes de la respectiva cámara. Una vez surtido el debate de moción de censura, dentro del tercer al décimo día siguiente se programará la votación para determinar si la moción prospera o se rechaza.

Por las razones que el país conoce, como es la presencia en Colombia de un número militares estadounidenses sin el respectivo permiso del Senado, la oposición legítimamente promovió moción de censura contra el Ministro de Defensa Carlos Holmes Trujillo, debate que se desarrolló el pasado jueves en el seno de esta corporación. Hasta ahí todo bien. Argumentos van y vienen en contra del ministro, y a su favor.

El Ministro cuestionado realiza sus descargos hechos por los citantes, también participan los voceros de los partidos de gobierno. En el debate hay elementos claros como el pronunciamiento reciente del Consejo de Estado, que revoca la resolución del Tribunal de Cundinamarca quien había resuelto una tutela indicando que el Gobierno había faltado al procedimiento con la presencia de tropas extranjeras. Como el Consejo de Estado deja sin efectos la tutela del Tribunal de Cundinamarca, es claro que allí aparecen argumentos importantes a favor del MinDefensa.

Una vez surtido el debate, lo que correspondía por la mesa directiva de la corporación, es convocar dentro del término previsto por la Constitución y la Ley, al Senado para votar la moción de censura. Pero sucede algo por fuera del procedimiento y creo que como en el fútbol, es una jugada de más, innecesaria porque la posición oficial tenía argumentos como el pronunciamiento del Consejo de Estado y las mayorías para que dicha moción no prosperara, sin necesidad de que con una simple proposición tratara de abortar lo reglado en la Carta Política y en el reglamento del Congreso sobre la materia.

Una proposición no puede reemplazar el procedimiento Constitucional. Lo que me parece es un flaco favor al gobierno y desacredita al Congreso, dando pie a que salgan voces diciendo que se quiere silenciar a la oposición.

Se tendrá que enmendar la ruta y continuar con el procedimiento preestablecido, por vía administrativa del Senado, o sino les tocará por la vía judicial, porque esto no aguanta ni siquiera una tutela.

Los procedimientos establecidos en la Ley hay que acatarlos, estamos obligado a ello, no los atropellemos y menos sin necesidad.