La obsesión de un hombre lo habría llevado a segarle la existencia a Yessica Paola Rodríguez Quevedo, de 31 años de edad, por ponerle punto final a un amorío de aproximadamente ocho meses. La mujer fue hallada con más de diez puñaladas en su cuerpo en la habitación del motel Las Acacias, en la Zona Industrial de Neiva.
La decisión de ponerle punto final a un amorío de ocho meses terminó costándole la vida a una mujer que era madre cabeza de hogar en la ciudad de Neiva. Dos niños de 6 y 15 años y dos niñas de 11 y 9 años hoy están huérfanos, sufriendo la ausencia de su progenitora, que les fue arrebatada cruelmente a manos de un individuo por obsesión.
“Se obsesionó con ella y al ver que ella no quería estar con él, pues hizo lo que hizo y es duro porque dejó cuatro hijos sin mamá”, indicó una de sus hermanas.
El indiciado
El sospechoso del crimen es un agricultor oriundo del municipio de Santa María, Huila, con quien se veía esporádicamente en Neiva. No tenían una relación sentimental estable, pero el sujeto sí la pretendió durante varios meses desde la distancia.
Al parecer, el samario quería controlarla, era muy posesivo, por lo que la víctima no quería darle más larga a sus encuentros con él. Precisamente, en varias ocasiones ya le había expresado su deseo de dejar las cosas hasta ahí, pero él nunca lo entendió.
La tenía amenazada
Al contrario, llegó incluso a amenazarla si lo dejaba. “Si usted no es para mí, no es para nadie”, fue una de las expresiones tajantes que recibió por parte de él.
El martes en la mañana, Yessica Paola Rodríguez Quevedo recibió una llamada en la que discutió por un largo rato, y al finalizar, quedó completamente pensativa. Al principio no quiso comentar nada, pero el miércoles a las 4:00 de la tarde, hora en la que decidió salir, compartió su situación con su hermana.
“José Antonio González la había llamado y ella le dijo que ya no quería tener nada con él, porque él la sofocaba mucho, le decía cosas y la había amenazado”, confirmó Yuri Rodríguez.
Su familia no había tenido conocimiento de aquellas intimidaciones hasta el momento de su salida; incluso no imaginaban que esas palabras se iban a materializar más tarde.
Día del crimen
El labriego llegó en la mañana del miércoles a la capital del Huila y la persuadió para que se vieran en el motel Las Acacias, ubicado en la carrera Quinta con calle Diecinueve Sur en la Zona Industrial de Neiva, prometiéndole que le ayudaría con dinero y dejándole a su nombre el derecho de la mitad de la propiedad de una camioneta supuestamente de él.
Esa tarde, ella tomó un mototaxi que la llevó hasta el sitio donde la esperaba el hoy prófugo de la justicia. La información revelada por las autoridades indica que el hombre llegó al establecimiento alrededor de las 4:30 p.m., solicitando el servicio de una habitación. Allí estuvo por casi una hora, hasta que arribó Yessica, aproximadamente a las 5:20 p.m., con quien permaneció alrededor de cuarenta minutos.
Posteriormente, el individuo salió del cuarto aludiendo que iría por comida cerca del terminal; sin embargo, nunca regresó. Con el paso de las horas, al encargado le pareció extraño que la mujer no saliera, por lo que asomó a verificar si algo había pasado.
Al ingresar, la observó tirada con múltiples heridas ocasionadas por arma blanca. Fue así como alertó sobre la situación al cuadrante de la Policía a las 06:25 de la tarde, por lo que una patrulla se trasladó al sector para constatar lo ocurrido.
Escabrosa escena
Al llegar al sitio, encuentran el cuerpo sin vida de esta persona de sexo femenino que el pasado domingo había cumplido sus 31 años de edad. Tenía más de diez puñaladas en las costillas, el tórax, los codos y los pies. Evidentemente, había muerto desangrada y por las afectaciones que tuvieron sus órganos vitales.
Unidades de la Sijin de la Policía Metropolitana de Neiva realizaron el levantamiento del cadáver y, con el apoyo del CTI de la Fiscalía, comenzaron las investigaciones.
Los equipos de inteligencia están analizando las cámaras de seguridad para obtener, ante un juez, la orden de captura del presunto asesino. “Pido que por favor se haga justicia, ya no queremos más feminicidios, que encuentren al responsable y pague por lo que hizo, eso no se hace, ella era madre cabeza de hogar de cuatro hijos y es muy duro para nosotros, nos quitaron a alguien que amábamos mucho”, dijo su hermana Yuri.
¿Quién era la víctima?
Yessica Paola era una ciudadana que vivía en el asentamiento Brisas del Guásimo, en la comuna Nueve de Neiva. Ella se dedicaba a los oficios varios, especialmente a ser ama de casa y a preparar alimentos como pasteles, papas y tamales que sacaba a la venta con el fin de ganarse el sustento, para que la comida no les faltara a sus hijos.
Del indiciado se sabe que vivía en una finca ubicada en la vereda San Joaquín, del municipio de Santa María.
Panorama en Neiva
Las cifras oficiales de la Policía Nacional y el Ministerio de Defensa revelan que entre el primero de enero y el 31 de octubre de 2024 se ha reportado el homicidio de seis mujeres; de las cuales, cinco eran adultas y una menor de edad. Esto representa un aumento del 50%, en comparación con los cuatro asesinatos que se presentaron para la misma fecha del año pasado.
Referente a sucesos puntuales de feminicidios, se conocen tres, correspondientes a: el primero, el de Katerine Andrea Caviedes Montealegre, de 35 años, ocurrido el 14 de abril del presente año al interior de un motel en la vía Neiva – Palermo. El segundo fue el de Diana Paola Dussan Gasca, de 33 años, que tuvo lugar el pasado 8 de noviembre en el barrio Pozo Azul de Neiva y el tercero, y más reciente, es el de Yessica Paola Rodríguez, de 31 años de edad.