Gabriel Calderón Molina
Como columnista de este periódico y como miembro de la Fundación por la huilensidad “Jorge Villamil Cordovez”, me es imposible pasar por alto el éxito musical del evento “Villamil en Jazz” efectuado el pasado 20 de este mes en el auditorio de Corhuila con el lleno casi total de este espacio destinado para la cultura y la academia. La calidad y la impresionante creatividad de la agrupación musical del pianista huilense Alex Pastrana, acabó con cualquier duda que pudieran tener los escépticos sobre esta forma de interpretación de las canciones del maestro que podría hacer de él un compositor más universal de lo que es.
La interpretación en jazz de las canciones: La Mistela, Los Guaduales, Espumas, Llamarada, El Barcino, Al Sur, Oropel, El Huilense, Matambo, Luna Roja y la Zanquirrucia, conmocionó a los asistentes cuya respuesta fueron los aplausos intensos que una a una brindaron a los intérpretes.
Precisamente hablando en estos días con algunos de quienes asistieron al evento, además, de elogiar las calidades de quienes intervinieron, como lo fueron las dos extraordinarias voces femeninas, decían que esta era nueva forma creativa de presentar y universalizar la música del Maestro Villamil y que habría la posibilidad de hacer lo mismo con la música de otros compositores huilenses, como sería el caso de Héctor Álvarez, Álvaro Córdoba, Luis Carlos Álvarez y tantos otros que a lo largo de décadas han enriquecido nuestra cultura huilense. Habría seguramente un mar de posibilidades siempre y cuando Alex Pastrana y su trío acometan esa tarea y los huilenses estemos dispuestos a disfrutar de sus innovaciones y así fortalecer en el departamento del Huila la economía creativa, una nueva e interesante Apuesta Productiva de la Agenda Interna.
Hay que resaltar que estos esfuerzos de la Fundación, cuyo nuevo presidente es el Dr. Germán Palomo García, por deleitar a los huilenses con la música de Villamil interpretada en otro ritmo, están dirigidos a fortalecer la obra del Museo creado hace 10 años con el cual se busca preservar la memoria de nuestro gran compositor. Con los recursos que se han conseguido en este año ya se han superado deficiencias que hacen de él, un lugar de cultura regional atractivo para los huilenses y colombianos que valoran el legado del compositor. La tarea será larga, pero el maestro Villamil, así como la pléyade de compositores huilenses, requieren de un espacio para mostrar su obra a las futuras generaciones.