Seis personas, entre ellas una mujer, fueron capturados por robar vehículos y extorsionar a sus dueños para entregárselos. La banda ‘Los Haladores’, deberá responder por delitos como hurto y extorsión, entre otros.
Tareas definidas tenía cada uno de los integrantes de la banda ‘Los Haladores’, dedicada al robo de vehículos y exigir dinero a sus dueños para devolvérselos, en la ciudad de Florencia (Caquetá).
El desmantelamiento de la ‘empresa criminal’ ocurrió ayer en la mañana, luego de varios meses de investigación y seguimiento por efectivos de la Sijin de la Policía en coordinación con unidades del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI).
El coronel Óscar Andrés Lamprea Pinzón, comandante de la Policía en Caquetá, manifestó que durante los trabajos de investigación, los efectivos lograron recolectar elementos materiales probatorios y evidencia física para obtener las órdenes de captura contra cinco hombres y una mujer por los delitos de hurto calificado y agravado, extorsión y concierto para delinquir.
Las capturas se efectuaron simultáneamente en los barrios Isla 20 de Julio, la Ciudadela Siglo XXI, urbanización la Gloria y el barrio Constructores de Florencia, donde fueron capturados los integrantes de la banda y se recuperaron cinco motocicletas, un carro. “Se inmovilizó un taxi que era utilizado por la estructura delincuencial para realizar los desplazamientos por la ciudad para evadir el control de las autoridades y seleccionar sus nuevas víctimas”, dijo el oficial.
Sostuvo el coronel Lamprea Pinzón, que las personas que integraban la organización delincuencial tenían sus funciones definidas. ,”Algunos de los capturados presentan antecedentes penales y anotaciones judiciales”.
Unos se encargaban de seleccionar las motocicletas a hurtar mediante la modalidad de halado y alteración al sistema de encendido “aprovechando su profesión como mecánicos se robaban las motocicletas y las desbarataban por partes”.
Otros de los delincuentes tenían la tarea de vender las partes de las motos y carros desguazados. Otros comercializaban los vehículos y los trasladaban a zona rural de los municipios del norte para evitar que fueran recuperadas por las autoridades.
Mientras que los demás realizaban funciones de inteligencia y monitoreo del movimiento y presencia de las patrullas de la Policía para ejecutar los robos.
Señaló el Comandante de la Policía en Caquetá, que vendían las motocicletas a precios entre un millón y millón doscientos mil pesos, generando ganancias anuales entre 70 y 80 millones de pesos.
Las personas capturadas fueron dejadas a disposición de la Fiscalía que los llevará a las audiencias preliminares ante el juez de garantías.