La Nación
La panela es nuestra 1 26 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

La panela es nuestra

 

Flora Perdomo Andrade

Uno de los productos más tradicionales y ancestrales enfrenta hoy una dura polémica en el país por cuenta de las pretensiones de algunos empresarios que quieren introducir en el medio un endulzante de similares características que sin lugar a dudas podría poner en riesgo la producción panelera colombiana y por ende el sustento de miles de familias que viven de su venta y comercialización.

Son cerca de 350 mil familias en el país que viven de este producto, lo trabajan, lo procesan y venden en el mercado. Es una práctica milenaria que ha sido transmitida de generación en generación, por lo que industriales pretendan a través de una patente romper ese proceso y obtener réditos económicos de ello, es un despropósito que llevaría a cerca del 13 por ciento de la población rural colombiana a enfrentar una crisis económica y asumir una competencia desigual frente a la gran industria del azúcar en nuestro país.

El Huila es el sexto productor, más de 6 mil familias principalmente del sur del departamento trabajan en la producción de panela de alta calidad; de hecho varias administraciones municipales entre las que se encuentran San Agustín, Isnos y La Plata, lideran el desarrollo de proyectos productivos con sus comunidades utilizando la panela como eje de sus propuestas para el crecimiento social y la reactivación económica. Varias organizaciones asociativas están exportando sus productos con excelentes resultados y el avance de este sector de la economía regional ha sido importante en el último tiempo debido a la calidad de la producción y al desarrollo de los procesos que han convertido la panela que se produce en nuestro suelo como una de las mejores del país.

Desde el Congreso de la República hemos venido insistiendo en debates y a través de la Ley de Compras Públicas Locales para que este dulce producto netamente campesino sea incluido en las minutas alimenticias de los Planes de Alimentación Escolar (PAE), haga parte de la variedad de oferta de alimentos que las entidades del Estado deben ofrecer tanto en Ejército, como Policía, Inpec, Icbf, entre otros, dado que está comprobada su riqueza en nutrientes, poderes curativos y demás.

Destaco el liderazgo del Gobierno Departamental que viene adelantando tareas de apoyo para aumentar el consumo y se convierta en un mecanismo que contribuya de manera significativa a la economía regional. La realización de ferias y de jornadas de promoción invitando a adquirir panela es una apuesta productiva que merece todo nuestro reconocimiento.

Le hemos pedido al Ministerio de Agricultura ejercer una férrea defensa del campesinado, entendiendo que sus precarias economías estarían en grave riesgo de permitir y aprobar una patente que busca controlar y definir el proceso de elaboración de la panela. La Superintendencia de Industria y Comercio informó que en los últimos 15 años, se han tramitado 13 solicitudes de patentes relacionadas con este producto. La propia entidad confirmó que varias de estas han sido aprobadas, aclarando que no están relacionadas con el proceso de producción, pero si con aspectos como invención de maquinarias y equipos y elaboración de nuevos alimentos derivados de esta; razón por demás para reiterar la necesidad de proteger el proceso tradicional, pues de no hacerlo se le estaría propinando  un certero golpe a los más vulnerables, pero a la vez a los más importantes, el campesinado que contribuye al equilibrio alimenticio de nuestro país.

Vale la pena señalar que después del café, la panela es el producto de mayor importancia a nivel social y económico para el campo. 511 municipios del país adelantan producción panelera y el Huila va camino a convertirse en una de las regiones de mayor producción y con la mejor calidad.

El Gobierno Nacional tiene retos muy grandes. Le asiste la responsabilidad de proteger y apoyar con capacitación, programas especiales, tecnología y el mejoramiento de las vías rurales para hacer mucho más competitivo el producto, pero siempre pensando en la economía rural, familiar, comunitaria y campesina.

¡La panela es nuestra!, dejarla en manos de industriales sería catastrófico, injusto y descomedido con quienes han sido sus principales gestores y promotores.

floraperdomo1@hotmail.com