Rondando por las calles del municipio se encuentran nuevamente estos individuos, quienes habrían intentado escapar de las autoridades, tras presuntamente, haber cometido un hurto. Los implicados, no fueron judicializados porque la captura no fue en flagrancia.
Una vez más la inseguridad se ensaña contra los habitantes de la capital arrocera del Huila. En esta oportunidad, una mujer fue víctima de los atracadores, que la interceptaron y la intimidaron en la mañana de ayer, sobre la calle 20 con carrera 12 del barrio Eduardo Santos del municipio de Campoalegre.
Los implicados, se movilizaban en una motocicleta de la marca Suzuki Best 125 de placa KNJ34C, en la cual, presuntamente consumaron el ilícito. El hecho se registró sobre las 8:00 de la mañana del viernes, en inmediaciones del sector conocido como el ‘Matadero Viejo’.
Allí los sujetos le arrebataron un bolso a la femenina, dándose a la fuga con destino desconocido. En la pronta reacción de las autoridades, y en un trabajo interinstitucional, se logra interceptar a los supuestos bandidos, cuando se movilizaban por la vereda La Sardinata.
En menos de una hora el Plan Candado que realizó el Departamento de Policía Huila, dio fruto cuando en coordinación con el Ejercito Nacional, se empieza una persecución, a dos sujetos, quienes, al observar la presencia de las autoridades, emprenden la fuga, arrojando un bolso con los elementos que habían sido robados, minutos antes en el casco urbano de la población.
Una vez que se realizó la inspección de los elementos, se pudo establecer que eran los mismos que le habían arrebatado a la afectada, por lo que se permitió su recuperación. De acuerdo con el reporte emitido por la Estación de Policía de Campoalegre, fue hallado un portátil Asus avaluado en $1’700.000, un celular Huawei Y9 avaluado en 700.000 y $90.000 en dinero en efectivo.
Algunos metros más adelante fueron reducidos Jorge Leonardo Charry Claros y Sebastián Vega Murillo, quienes son residentes del barrio El Galán de ciudad de Neiva. Pese a que la víctima los identificó y los señaló como presuntos autores del atraco, no pudieron ser judicializados debido a que la detención no se dio en flagrancia.
Así las cosas, Charry Claros y Vega Murillo, recobraron su libertad, como si nada hubiese pasado. Los elementos fueron devueltos a su propietaria, quien agradeció el trabajo de la Fuerza Pública.