La Nación
‘Algeciras ve una nueva oportunidad’ 1 26 abril, 2024
HUILA

‘Algeciras ve una nueva oportunidad’

Lejos parecen estar hoy los días de violencia que vivió este municipio. Hoy, la comunidad reaviva su esperanza en un mejor porvenir, según cuenta su alcalde. Lejos parecen estar hoy los días de violencia que vivió este municipio. Hoy, la comunidad reaviva su esperanza en un mejor porvenir, según cuenta su alcalde. LA NACIÓN, NEIVA Por varios años, el municipio de Algeciras sufrió el estigma de ser el epicentro de sucesivas alteraciones de orden público. Su estratégica localización, en las estribaciones de la cordillera Oriental, y a un paso del Caquetá, lo convirtieron en uno de los municipios más afectados por

En obras públicas, Algeciras espera superar críticos problemas viales.

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atentados y ataques de la guerrilla de las Farc a la fuerza pública y a la misma población civil. Sin embargo, de esos momentos solo parecen quedar dolorosos recuerdos. Años atrás, ni el alcalde ni los concejales permanecían en la población; ahora, viven, trabajan y sesionan en Algeciras. La población, que se erige en una riquísima zona de producción agropecuaria, intenta ahora sacudirse de esa historia, impulsar proyectos nuevos de desarrollo, dejar atrás el rezago por el desinterés del Gobierno nacional, superar los problemas que le han dejado muy intensas olas de lluvias y hacer valer el calificativo de “despensa agrícola del Huila”. Su alcalde, Alexander Martínez, está convencido de haber podido comenzar las tareas que Algeciras tenía pendientes, y en diálogo con LA NACIÓN, contó los resultados de quince meses de mandato de los que, según explicó, “ya comienzan a verse los resultados”. ¿Qué ha sucedido en estos quince meses en Algeciras? Creo que vamos muy bien. Algeciras goza de una tranquilidad que hace muchos años no se veía. Ha vuelto la gobernabilidad. Por la situación que hubo en años anteriores y de violencia, por la vecindad con la zona de distensión, entre otros factores, se había alterado el orden público en nuestro municipio. Hacía más de doce años que los concejales no sesionaban en Algeciras, y al alcalde como tal se le dificultaba hacer presencia y mucho menos salir a las veredas. Podemos decir que la situación ha mejorado bastante, que los concejales completan también quince meses de estar trabajando directamente en el municipio de la mano con la comunidad, y lo mismo, en el caso personal, hemos regresado al sector rural, y a coordinar acciones directamente con las comunidades, a socializar obras que ya están en camino o que se están gestionando con los gobiernos departamental y nacional. ¿Ha cedido la presión de los problemas de orden público? El alcalde de Algeciras (derecha), junto al ministro de Vivienda, Germán Vargas.Ha vuelto la normalidad que hace muchos años no se veía en nuestro municipio. El gobierno nacional ha puesto los ojos en Algeciras y ha empezado a entender que con inversión social es la única manera de poder salir al paso de todos estos inconvenientes que se presentaban en otras épocas. Yo considero que es de importancia que se estén adelantando obras de gran impacto, con las que se ha generado empleo, y de esta manera la comunidad está satisfecha. Llevamos bastantes meses sin que se produzcan alteraciones del orden público, a diferencia de otras épocas, cuando estos episodios eran muy frecuentes. Considero que es precisamente el trabajo que hemos venido haciendo de tocar puertas, de hacerle ver al Gobierno departamental y nacional y sus entidades que Algeciras no es como lo pintan. Algeciras cuenta con una comunidad trabajadora, honesta y luchadora, que a lo largo de los años es lo único que ha sabido hacer: trabajar la tierra y buscar cómo sostener sus familias, pero ha tenido esa mala imagen que nos ha perjudicado. Hoy queremos invitar a quienes no conocen Algeciras y su gente, para que nos visiten, para que inviertan, contamos con unas excelentes tierras y un excelente clima. ¿Cómo va la solución a los problemas viales? Nuestro municipio ha tenido múltiples inconvenientes. Desde 2009 se presentó una avalancha sobre Quebradón Sur, cuando fueron arrasados más de seis puentes, y quedamos incomunicados con el resto del departamento y el país. Hay algunas obras que se han realizado y se han podido concluir, pero otras no se han podido llevar a cabo por falta de interés del Gobierno nacional. Hay unos puentes provisionales en la única vía de acceso a nuestro municipio y hay aún tres puentes en Quebradón Sur. Se construyeron  dos puentes peatonales el año pasado, pero esas comunidades sufren por la falta de comunicación. De igual manera, hay familias que lo perdieron todo, y hay recursos en el Fondo de Adaptación. Son 29 familias que están inscritas. Tenemos la imperiosa necesidad de que el Gobierno nacional desembolse estos recursos, unos 35 millones de pesos para cada una de estas familias afectadas, y que no ha sido posible que le asignen. ¿Qué ha pasado? En el Fondo de Adaptación, se nos ha informado que estaban pendientes de designar el operador, cosa que ya sucedió, que es la Fundación Minuto de Dios, pero todo el proceso ha sido muy lento. Este reclamo se les ha hecho a ministros y a encargados de este tema, porque de no haber los recursos, sería más complejo. Pero los recursos están en cuentas. Incluso, algunos algecireños se retiraron de las listas de espera al quedar pendientes de soluciones que no llegaron del Gobierno nacional. Estamos gestionando para que prontamente desembolsen estos recursos y atender a estas personas afectadas en el 2009. ¿Y la vía al Caquetá? La vía a San Vicente del Caguán, sobre todo el año pasado fue cuando tuvo mayor afectación. La mayor parte de las comunidades de Balsillas que es territorio de San Vicente tiene más vínculo con Algeciras. Para ellos hemos hecho hasta donde hemos podido para poder rehabilitar la vía desde el centro poblado de El Paraíso hacia Balsillas. El año pasado , cuando hubo derrumbes, los primeros en entrar a la zona fuimos nosotros, conocemos de los inconvenientes que se presentaban, de la gran cantidad de productos que sacan, del ganado que sale de esta zona y que se vio estancado por no contar con una vía. Sin embargo, nuestros recursos son insuficientes. Además, esto le correspondía al gobierno del Caquetá y un sector a Invías. Y aunque se ha hablado de la intención e interés de hacer inversiones viales en la zona, hasta el momento no se han concretado. Son más de siete puentes artesanales en los que ha habido ya algunos accidentes. En esta semana que recorrí la zona, un camión cargado con ganado quedó atascado en la vía. Por eso se requieren los recursos necesarios del gobierno nacional, por tratarse de una vía regional, no solo intermunicipal. Hemos cementado tres kilómetros entre Algeciras y El Paraíso, próximos a terminar, y tenemos un proyecto por 2.500 millones de pesos para continuar con esta pavimentación y rehabilitar dos puentes que están en este sector. También se han presentado al Fondo de Regalías para continuar en esta dirección. Se requieren más de diez mil millones de pesos para culminar ocho kilómetros que tienen estudios y diseños. Con el Gobierno departamental, presentamos un proyecto al Fondo de Regalías, para continuar con los estudios y diseños desde El Paraíso hacia Balsillas. Ojalá en tiempo no muy lejano tengamos una vía totalmente pavimentada, que conduzca de Algeciras a San Vicente del Caguán. ¿Cómo marchan las relaciones con el Concejo? Algeciras goza de una excelente paz en todo sentido. El manejo de relaciones con el Concejo es de respeto en cada una de sus decisiones, y de los proyectos presentados el año pasado todos fueron aprobados con algunos cambios y observaciones. Esto ha dado pie para que el municipio salga de esos inconvenientes. Hoy trabajamos con algunos de quienes estuvieron en la contienda electoral, y se ha hecho un llamado a la unidad, de manera que Algeciras avance. No basta solo con buenos deseos sino realmente hay que concretar proyectos. Hemos venido trabajando con personas de otras tendencias políticas. Esta es una oportunidad valiosa para poder trabajar todos juntos y sacar adelante grandes iniciativas que favorecerán a las comunidades. En esto no ha existido mezquindad, se ha hablado con claridad, y que quienes tengan proximidad política o algún otro tipo de afinidad con funcionarios de rango a nivel nacional, nos ayuden a abrir puertas y considero que este es parte del éxito de nuestra administración. ¿Cómo va el tema de vivienda social? El ministro Germán Vargas presentó y puso la primera piedra de las 50 viviendas gratuitas que se construyen. Lo importante es que estas familias se verán favorecidas a finales de año. El recurso, son 2.068 millones de pesos que circularán en Algeciras y que generarán empleo y actividad comercial. En Algeciras hace más de 20 años que no se construían barrios. Por eso es de gran importancia. Se construirá también el Centro de Desarrollo Integral, con una inversión de más de mil millones de pesos para contar con un espacio adecuado para los niños de cero a cinco años, construido cerca de las zonas más vulnerables de Algeciras, y esto motivará la actividad económica. Este año se invertirán más de diez mil millones de pesos de gestión, además de otros recursos nacionales y regionales. ¿Cómo ve el futuro del Algeciras? Cualquier persona puede ir y notar el cambio en el municipio. Este año esperamos avanzar más con los proyectos radicados el año pasado, con recuperación de escenarios deportivos, claves para nuestros niños y jóvenes, construiremos cinco polideportivos, tres de ellos en la zona rural; construiremos dos canchas sintéticas, recuperaremos la malla vial urbana y rural, pavimentaremos gran cantidad de barrios, con recursos ya asignados. En diciembre hicimos un alumbrado navideño, muy económico: en Algeciras nunca se había visto un embellecimiento como ese. Recuperamos el parque, al que la gente se acerca, reactivamos la vida nocturna, con eventos para la juventud, con cine al barrio, con actividades de integración con la comunidad. El municipio estuvo abandonado por falta de gestión y de unión de los mismos algecireños, pero ahora,  esta ha sido la solución a este atraso. La gente piensa en una nueva oportunidad.