Crece la controversia por la Asamblea Nacional Cafetera que se desarrollará hoy en Bogotá y que fue convocada por el gobierno nacional. El exministro Andrés Valencia dijo que se está buscando “debilitar” a Fedecafeteros. La SAC también se unió al debate.
CATERIN MANCHOLA
Aumenta el pulso en torno a la Asamblea Nacional Cafetera convocada por el Ministerio de Agricultura, que se desarrollará hoy y mañana en Bogotá y será presidida por el presidente Gustavo Petro; pero no se invitó a la Federación Nacional de Cafeteros.
Según el gobierno, el objetivo es que los voceros de las organizaciones, cooperativas y asociados cafeteras de todo el país acudan a la capital para firmar un pacto que permita mejorar la rentabilidad del sector.
En contraste, voces en contra del evento, como la del exministro de Agricultura, Andrés Valencia, advierten que los objetivos son otros. Según Valencia, en realidad se quiere “debilitar política y gremialmente a la Federación Nacional de Cafeteros, buscando crear una institucionalidad cafetera paralela para instrumentalizarla con el fin de impulsar su constituyente sobre una base campesina”.
Entre otras cosas, dijo que, para consumar los planes, el Jefe de Estado “necesitará de plata y esa está en el Fondo Nacional del Café y en el Fondo de Estabilización de Precios”. Y rechazó que en realidad, los caficultores van a la Asamblea pero, “con otras expectativas: que les den plata y les condonen las deudas”.
“Ratificar lo anunciado”
Desde Neiva, ayer el director de la Unidad Administrativa Especial de Organizaciones Solidarias, Mauricio Rodríguez Amaya le salió al paso y afirmó que en Bogotá van “es a ratificar lo que ya anunció el señor presidente Gustavo Petro en el encuentro con el sector cafetero en Pitalito, Huila, en agosto del 2023, y es que: el café tiene que pasar de la mera producción de materia prima a la industrialización, con un modelo que llamamos industrialización solidaria. Y es que los productores de café se conviertan en dueños de la industria y del mercado. Hoy, la forma como está estructurada la cadena del café en Colombia hace que los productores vendan su grano, pero que los valores agregados de la transformación y comercialización se queden en otros lugares”.
Esa “industrialización solidaria” busca que las organizaciones que ya existen, se articulen, en la Red Solidaria del Café – Cafesol, y “puedan desarrollar proyectos de industrialización conjunta de la mano del gobierno nacional, el apoyo de la unidad solidaria, Ministerio de Agricultura y crédito del Banco Agrario”.
Aseguró, que la “Federación Nacional de Cafeteros tiene que venir también a ayudarnos en este propósito en el sentido de que, tenemos que empoderar al productor, generar las condiciones para que esos productores logren quedarse con el valor agregado”.
Enfatizó en que se debe “repensar todo el modelo”. Además, aseguró que al encuentro de Pitalito “estaban invitados todos los Comités de Cafeteros, yo me reuní con ellos”, así mismo, aclaró que no son los organizadores del evento, pero que para hoy y mañana “está invitado todo el sector cooperativo, yo supongo que ellos –la Federación- están invitados, esta no es una disputa con la Federación, este es un modelo que va a alimentar y fortalecer a toda la cadena del café. La Federación tiene una estructura de trabajo que funciona muy bien y a Colombia le ha sido muy útil, sobre todo en materia de comercialización, pero hay dos problemas fundamentales que hay que resolver con la Federación y todo el movimiento asociativo de cafeteros de Colombia, y es que el país debe salir de la mera producción de mera materia prima y, además, diversificar nuestros productos de café. Entonces, eso lo podemos hacer con todos: Federación, asociaciones de productores y redes de todo el país. Eso es lo que estamos trabajando”.
Finalmente, frente a la supuesta creación de una cooperativa para que le compita al gremio, aseguró que “eso es falso. Primero, no hay manera de hacerlo, porque la Federación es una organización de segundo nivel, es decir, al interior de ella hay muchas cooperativas”. Y fuera de ella también, anotó.
“Nosotros no tenemos una discusión con la Federación, ni es nuestra apuesta y no hay manera de hacerlo, ni siquiera técnicamente es posible. Este país vive de rumores, tiene una estructura de comunicación tradicional basada en rumores y ahí nosotros no podemos hacer nada”, puntualizó.
Opiniones encontradas
No obstante, en Pitalito también fue cuando el presidente Gustavo Petro advirtió que “si la Federación de Cafeteros no se reestructura de acuerdo a la base cafetera, se acaba el contrato del Fondo Nacional del Café con la Federación”. Y desde entonces ha venido lanzando comentarios ácidos, por ejemplo, hace pocos días dijo que el gremio “es el ejemplo del robo del café por parte de la oligarquía”.
Ayer, desde el Comité de Cafeteros del Huila precisaron que nunca fueron invitados al encuentro en Pitalito, como tampoco a la Asamblea de hoy en Bogotá. Otra cosa es que asistan por cuenta propia, no como institución.
En medio de toda esta puja, la Sociedad de Agricultores de Colombia –SAC, exhortó al gobierno a “apoyarse en la legitimidad, representatividad, fortaleza institucional y capacidad de convocatoria de la Federación Nacional de Cafeteros”. Como también, “reconocer y garantizar la participación de estas instituciones en las decisiones que impactan la ruralidad”. Además, resaltó la democracia que se vive en el gremio.
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