La Nación
COLUMNISTAS

Basura y contaminación visual

La falta de cultura ciudadana, de respeto por nuestros connaturales, sigue siendo una manifestación protuberante del atraso y subdesarrollo de muchos mal llamados ciudadanos que no tienen el más mínimo pudor y a quienes poco y nada les importa arrojar desperdicios a la calle o como en el caso del que nos ocuparemos, contaminar visualmente la ciudad con publicidad política, pese a que han pasado ocho días de las elecciones.

Existe una clara y  expresa normatividad al respeto, pero no se cumple y no se hace cumplir por parte de las autoridades respectivas. De tal suerte la responsabilidad es por partes iguales.

La situación, que conocen miles de transeúntes por nuestra capital, es que todavía hay muros, paredes, tapias, portones con visibles figuras y leyendas alusivas a los candidatos que estuvieron en contienda hasta el 25 de octubre próximo pasado. Otro tanto sucede con pasacalles y afiches en puertas, ventanas y postes del alumbrado público. Los partidos políticos y los candidatos son los responsables de esta contaminación visual y sobre ellos deben las autoridades aplicar las sanciones estipuladas en la normatividad. Con todo, como anotamos, ni políticos ni autoridades respetan o hacen respetar los mandatos legales.

Como representante de Fenalco y como simple ciudadana hago un vehemente llamado a la disciplina social, al respeto, al acatamiento a las leyes, al amor por lo nuestro, por nuestra ciudad, por nosotros mismos, por nuestra descendencia que está recibiendo tan mal ejemplo. Así no se atrae al visitante o al turista, de tal manera da pena que conozcan la ciudad. Ese no es el mejor sistema de entrar en el campo de la competitividad, del crecimiento o del progreso.

Aunque parezcamos pendencieros vamos a insistir en esta campaña que adelantaremos conjuntamente con esta casa editorial de LA NACIÓN haciendo un llamado de atención para que no seamos mugres con Neiva. En este propósito esperamos contar con el respaldo de nuestros próximos gobernantes y líderes en las corporaciones como concejos, Asamblea y juntas administradoras locales. Todo ciudadano de bien debe sumarse y hacer causa común, es por los más de cuatrocientos mil habitantes de la capital del Huila, por los turistas, por el bienestar a que tenemos derecho todos, por la cultura y el respeto. Y por último, invitar a la empresa Ciudad Limpia para que con su selecto equipo humano nos de la mano en este cometido.