Un teléfono celular salvó la vida de un vigilante de un Hogar Infantil, tras ser atacado a bala por fleteros que le habrían hurtado 10 millones de pesos, en Neiva. LA NACIÓN, NEIVA Un teléfono celular salvó la vida de un vigilante de un Hogar Infantil, tras ser atacado a bala por fleteros que le habrían hurtado 10 millones de pesos, en Neiva. El ataque a Hernando González ocurrió hacia las 11:45 a.m. de ayer, a la altura de la Calle Cuarta con Carrera 15A en el barrio Obrero, en cercanías a una empresa de seguridad privada y la iglesia San José. Voceros de la Policía en Neiva manifestaron que el hombre había salido de una entidad bancaria en el centro de la capital huilense, donde habría retirado 10 millones de pesos para la nómina. “En el banco le ofrecieron el servicio de escolta y él no la aceptó”. González, de 46 años de edad, quien se transportaba en un automóvil Chevrolet Sprint de placa CDK-027, en compañía de una funcionaria del hogar, fue interceptado por los fleteros a bordo de una motocicleta de alto cilindraje de color negro. “Los ladrones le atravesaron la moto frente al carro, una llanta de la moto quedó debajo del vehículo”, dijo una empleada de la compañía de seguridad. El hombre fue amenazado con un arma de fuego por los delincuentes, quienes ante la resistencia de la víctima le dispararon a la altura del pecho, siendo impactado en el teléfono celular que llevaba en el bolsillo. “El equipo celular amortiguó el proyectil…”, manifestó el portavoz policial. Sin embargo, la bala atravesó el celular y causó una herida en González, quien fue auxiliado por una mujer que lo llevó en su automóvil al Hospital Universitario de Neiva, donde fue operado.