Los permisos sindicales
La ex mandataria, fue sancionada con suspensión de dos meses, por una extralimitación de funciones, según lo confirmó en primera instancia la Procuraduría General de la Nación.
La ex mandataria le reconoció en el 2007 permiso sindical al presidente de la Asociación de Institutores Huilenses (Adih) José Luis Castellanos, a Luz Dary Torres y a Ana Patricia Polanía, como una garantía concedida a dirigentes sindicales.
El permiso implicó que los educadores, quedaron sin la carga académica que venían desempeñando en las instituciones educativas, dejando de cumplir las funciones propias de sus cargos.
Aunque los permisos sindicales están amparados en la legislación nacional y en convenios internacionales, la procuradora primera Delegada para la Vigilancia Administrativa, Clara Ivy González Marroquín estimó que González Villa “se extralimitó en el ejercicio de sus funciones y desconoció las disposiciones legales que rigen lo relacionado con la precisión que se debe observar al otorgar esta clase de permisos y, por el contrario, es este caso se otorgó de manera constante permanente e ininterrumpida”.
Por considerar que la ex mandataria no ejercía funciones públicas cuando salió la sanción, la sanción disciplinaria fue convertida en una multa equivalente a los salarios percibidos para la época de los hechos que se calcula en la suma de 11,21 millones de pesos.
“En ningún momento ese permiso se extendió de manera permanente, argumentó el abogado José Nelson Polanía, quien ejercía como director del Departamento Jurídico en la época de los hechos.
Aunque en su momento se alegó que los permisos sindicales, generaron un eventual detrimento patrimonial, al tener que designar docentes para ocupar las vacantes de los tres sindicalistas, la Contraloría de Neiva, archivó la investigación fiscal, estimando que los permisos se otorgaron conforme a la ley.