Siete paicoleños integran la asociación Asor Amigos del Planeta, quienes han hecho de los residuos un negocio amigable con el medioambiente y obras de arte. De un litro de aceite usado, pueden sacar hasta 12 jabones de 150 gramos.
Todos los miércoles, Diego Armando Penagos y Ana Rita Zuñiga, dos recicladores paicoleños, hacen el mismo recorrido: se suben a la ´Carroza de la Alegría´, una motocicleta Honda CB110, en la que transportan un bafle con música colombiana y un remolque, y visitan una a una las casas de Paicol, el municipio que los vio crecer.
Vestidos de jean y un buso mangalarga negro con el logotipo de la asociación (Asor Amigos del Planeta) bajan de la moto al ritmo de sanjuaneros y cumbias para recolectar los materiales reciclables que decenas de familias dejan a las afueras de sus hogares como papel, vidrio, plástico, metal y cartón. Asor ya ha sensibilizado a cientos de personas en esta población del occidente del Huila.
Diego de 32 años y Ana de 53 años, reciben los residuos, previamente separados por los pobladores, luego de un proceso de sensibilización y acompañamiento técnico y profesional que realizó la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena – CAM, el cual lograron aplicar satisfactoriamente en la población. A cambio de los residuos entregados en ‘tulas’ con el nombre Proyecto Ciudadano de Educación Ambiental (Proceda) ‘Huila Recicla’, los integrantes de la asociación entregan dulces a los niños, niñas y adultos involucrados en el proceso.
De las ocho horas de recorrido por el municipio recogiendo residuos, en más de 10 ocasiones visitan la bodega de la asociación para dejar el fruto de su trabajo. Ahí, otro equipo de recicladores, igualmente uniformados, recibe el material, lo separa para venderlo o transformarlo en bellas artesanías.
Aceite en jabón
Adicionalmente a los residuos que recolectan los días miércoles y lunes, recogen puerta a puerta todo el aceite de cocina usado en las casas que es transportado en unos tanques para luego adelantar un proceso de transformación convirtiéndolo en productos de aseo como jabón lavaloza entre otros. Un proceso que los llevó a alcanzar el tercer lugar, entre 300 participantes, en el ‘XV Premio Nacional de Ecología Planeta Azul 2022” premiado por el Banco de Occidente, en la categoría ‘General’.
De un litro de aceite usado se pueden sacar hasta 12 jabones de 150 gramos. “Ese proceso desde el inicio toma cerca de 40 o 45 días, para ya tener un producto final”, explicó Farid Polo, reciclador y encargado de transformar el aceite usado.
“Este proceso se destaca porque visibiliza la importante labor que realizan las organizaciones ambientales en la conservación de la naturaleza y además Asor Amigos del Planeta, viene implementando acciones pedagógicas que ha permitido concientizar a la comunidad sobre el reciclaje y el cuidado de los recursos naturales. Adicional a ello, realizan la transformación de los residíos”, dio a conocer Adriana Arias, coordinadora de Educación Ambiental de la CAM.
Nace Asor
“De una necesidad grande que hay en el municipio surgió la asociación, pues al ser una localidad turística por la Caja de Agua, La Motilona, la iglesia Santa Rosa de Lima y la gran afluencia de turistas, se empezó a ver una gran cantidad de residuos abandonados en todos lados. Fue entonces que las personas que trabajamos en el sector turístico, decidimos empezar un movimiento que ha vinculado a personas de diferentes profesiones como agricultores, administradores de hoteles y amas de casa para implementar el reciclaje en el municipio”, relató Diego Amando Penagos, quien además de ser el socio fundador, es el representante legal de Asor.
La Asociación la iniciaron tres guías turísticos: Víctor Torres, Jesús Polo y el actual representante de Asor y en marzo de 2020 se constituyó legalmente la asociación. Actualmente son siete los recicladores o ‘chulos’, como a veces les llaman, los que integran la asociación y entre quienes se dividen sus obligaciones.
Unas personas son las encargadas de la transformación del aceite y otras se ocupan de la elaboración de las artesanías, pues dentro del reciclaje se aprovechan elementos para convertir lo que unos llaman ‘basura’ en obras de arte.
“Mi arte refleja cosas de mi municipio, cosas bonitas y representativas que merecen ser plasmadas”, aseguró la reciclador Vilma Chávarro ama de casa de 43 años y madre de tres hijos.
Para continuar con esta labor y obtener más logros, el equipo de recicladores ya tiene trazados varios objetivos, entre ellos terminar de pagar la motocicleta, comprar un lote para construir su propia planta de reciclaje y seguir la sensibilización por el cuidado de los recursos naturales.
De un litro de aceite usado se pueden sacar hasta 12 jabones de 150 gramos.
