-El dedo en la llaga-
Raúl Sánchez Sánchez
Me ha sorprendido las reacciones al listado de bienes entregado por las FARC. Para los opositores es algo que no corresponde a la realidad, toda vez que presumen que tienen mucho más dinero y bienes de lo señalado. Sin embargo, es un gran paso, toda vez que con los grupos paramilitares jamás se hizo inventario de bienes o utilidades, fue simplemente una negociación, en donde se obtenían beneficios sin reparación.
Ahora bien ¿Como fue el cubrimiento mediático? El diario EL TIEMPO, en su titular resaltaba que habían entregado escobas y trapeadores. Por el contrario, EL ESPECTADOR, señalaba que la relación era de casi un billón de pesos. ¡Que diferencia! Luego, EL TIEMPO, entrevistaba a las víctimas, que se mostraban indignadas, pero reconocían que no conocían el listado. Finalmente, la revista SEMANA, se dio a la tarea de revisar con lupa la lista e hizo lo que se debía de hacer, esto es, un análisis objetivo de la misma. Entonces reseñó que las FARC habían incluido los bienes actuales y bienes en los que se habían gastado el dinero. Por esa razón, se cae en lo anecdótico como traperos o escobas. En nota de SEMANA, se observa que entregaron 2.500 millones en efectivo, 267.520 gramos de oro y 450.000 dólares, esto es, más de 4 mil millones de pesos. Asimismo, 241.000 hectáreas avaluadas en 441.500 millones de pesos, que corresponde a bienes inmuebles, ganado por 32.000 millones de pesos, entre estos 20.672 vacunos, 547 mulas y caballos, y algunos búfalos y ovejas.
Así las cosas, según las FARC hicieron entrega absoluta y total de todos sus bienes, pero para el Fiscal General de la Nación, estas cifras no cuadran de acuerdo a sus propias investigaciones. Esta inconsistencia se zanja de manera muy fácil. El acuerdo prevé que lo que no esté relacionado a partir de la fecha de entrega y sea usado, pasará a la justicia ordinaria, con todas las consecuencias que esto representa y así lo ha hecho saber el Fiscal General. Por lo tanto, los posibles beneficios que recibirían al acudir a la Jurisdicción Especial de Paz (JEP), se perderían.
Luego de todo el proceso de desarme, de relación de guerrilleros, de bienes, de caletas, entre todo lo entregado, todavía me pregunto ¿Cómo es posible que hubiese gente que creyera que las FARC iban a ser derrotadas? Tenían todo, hombres, dinero, armamentos, y aún, si quedarán 1.000 hombres harían mucho daño, por su modo criminal. Ahora bien, de todas maneras, queda como recurso la JEP, que será el sistema de justicia que acompañará este proceso, que sin lugar a dudas, servirá para la verdad y la reparación.