Ecuador deberá batirse con el favoritismo de Francia y de Suiza en el Grupo E, y cuidarse de Honduras, el rival que en teoría mejor lo conoce, para superar la primera fase del Mundial Brasil-2014 e igualar su hazaña de 2006.
Entonces, el conjunto ecuatoriano que dirigía el colombiano Luis Fernando Suárez, hoy seleccionador de Honduras, cayó en octavos frente a Inglaterra en la Copa Mundo de Alemania.
Casi ocho años después, Ecuador, bajo el mando del también colombiano Reinaldo Rueda, quien dirigió a Honduras en el Mundial Sudáfrica-2010, se siente satisfecho con la suerte que le deparó el sorteo mundialista.
Sin ser en principio uno de los opcionados, el equipo de Rueda está en condiciones de dar una dura batalla en el Grupo E.
Es un "grupo dificilísimo, son tres estilos diferentes. Sabemos que, en el caso de los dos europeos, tienen individualidades importantes, y que Honduras ha mostrado gran madurez", opinó el técnico cafetero.
Buena parte de las posibilidades de Ecuador recaen en su figura Antonio Valencia, el volante de 28 años del Manchester United y líder de una selección renovada e irregular que logró clasificarse a su tercera Copa del Mundo, después de los Mundiales de 2002 y 2006, venciendo la adversidad: la inesperada muerte del goleador Christian Benítez a los 27 años por una falla cardíaca.
"Es un buen grupo, muy parejo, pero el equipo deberá trabajar con mucha fuerza y humildad para poder conseguir el paso a los octavos de final del campeonato", señaló Valencia al diario El Comercio.
La lista de riesgos
El equipo sudamericano tendrá al frente a Suiza, cabeza de serie y que se clasificó a su décima Copa del Mundo con una campaña impecable; a Francia, campeona del mundo en 1998 y hoy un enigma tras los altibajos de los últimos años, y a Honduras, el equipo centroamericano que por segunda vez disputará un Mundial de la mano de un colombiano.
Cada uno de los rivales representa un desafío específico: Suiza y su gran solidez defensiva, Francia y el gran Franck Ribéry, aspirante al Balón de Oro de 2013, Honduras y Suárez, el técnico que guió a Ecuador en Alemania 2006 y quien podría convertirse en el dolor de cabeza para los ecuatorianos.
Rueda y Suárez protagonizarán un duelo aparte. Los técnicos colombianos enfrentarán a sus antiguas selecciones, y en los cálculos de ambos este partido podría ser el que sentencie su suerte en Brasil.
"No quería enfrentarme a Ecuador. No sólo por Reinaldo, sino por todo el país: significa mucho para mí (…), los sorteos son así. Trataremos de afrontar la situación como buenos profesionales", dijo Suárez a la prensa.
El equipo de Rueda debutará el 15 de junio frente a Suiza en Brasilia, después se medirá con Honduras en Curitiba el 20 de junio y cerrará con Francia el 25 de junio en Rio de Janeiro.
"Honduras es un equipo al que ya le hemos ganado en partidos amistosos. Suiza es una selección fuerte, pero estoy seguro de que nuestro equipo puede obtener los tres puntos y ante Francia habrá que aprovechar el bajón futbolístico que tuvieron esta temporada", dijo el exseleccionador ecuatoriano Polo Carrera a la agencia estatal Andes.
El equipo ecuatoriano, en el que además de Valencia sobresalen hombres como Felipe Caicedo y Jefferson Montero, parte en una posición incómoda, aunque ninguno de sus rivales en la primera etapa parece imbatible ni figura en la lista de los grandes favoritos de Brasil-2014.
Argentina espera un trayecto tranquilo en la primera ronda
Argentina espera un tranquilo trayecto en la primera fase del Mundial Brasil-2014, en la que deberá enfrentar a rivales accesibles como Bosnia-Herzegovina, Nigeria e Irán en el Grupo F, de "felicidad", como lo bautizó la prensa local.
El primer partido que jugarán los albicelestes será con Bosnia, un debutante en Copas del Mundo, el 15 de junio en el Maracaná de Rio de Janeiro.
Argentinos y bosnios se vieron las caras en noviembre pasado en St. Louis (Estados Unidos) en un amistoso en el que los sudamericanos superaron a los europeos por 2-0, con goles de Sergio "Kun" Agüero, el delantero estrella del Manchester City.
Luego del sorteo celebrado el viernes en Costa do Sauípe (Bahía, noreste), el estelar capitán del seleccionado, Leionel Messi (BC Barcelona), advirtió sobre los peligros de caer en triunfalismos.
"Feliz de conocer a los rivales. Por más que se hable, no hay equipos fáciles y todos los grupos son complicados", dijo la 'Pulga' en la red social Weibo, uno de los canales de comunicación que tiene el crack del club catalán.
Con el mismo criterio, Agüero había escrito en su cuenta de la red social Twitter.
"Ningún partido es fácil. Con esfuerzo y trabajo siempre hay recompensa. Vamos Argentina!", señaló.
El segundo partido será con Irán, un equipo que participa por cuarta vez en mundiales y cuyo debut fue, precisamente, en 1978 en Argentina, donde apenas sumó un empate con Escocia (1-1).
En las dos participaciones posteriores, Francia-1998 y Alemania-2006, no logró superar la primera ronda.
"El sorteo fue positivo en dos aspectos, logístico y deportivo. Pero no nos gusta el triunfalismo, preferimos el equilibrio", sostuvo por su parte el entrenador albiceleste Alejandro Sabella.
El tercer partido del equipo capitaneado por el astro Lionel Messi (FC Barcelona) será el 25 de junio contra las 'Águilas Verdes' de Nigeria, que protagonizarán su quinto mundial.
Los nigerianos, que accedieron a la Copa del Mundo sin derrotas en la eliminatoria africana, se enfrentaron tres veces con los argentinos, todos en primera ronda y con victorias albicelestes: 2-1 en Estados Unidos-1994 y 1-0 en Corea del Sur/Japón-2002 y Sudáfrica-2010.
El 'F', de Francisco o felicidad
En el aspecto logístico, la ventaja es que la selección tendrá su búnker en Belo Horizonte (sureste) y se moverá en un radio de 1.730 km en la etapa inicial, una distancia mínima en un país gigantesco como Brasil.
Debutará en Rio de Janeiro, luego jugará en Belo Horizonte (sureste) y cerrará en Porto Alegre (sur), muy cerca de Argentina y en donde para esa época del año la ciudad estará bajo el rigor del invierno austral.
Si avanza a los octavos de final como primera de la llave, Argentina se presentará en Sao Pablo, también ubicada a una distancia accesible, ante el segundo del Grupo E que integran Suiza, Ecuador, Francia y Honduras.
La letra del grupo sirvió a la prensa local para jugar este sábado con sus titulares, llamándola la "F" de la felicidad y de fácil, mientras algún periodista deportivo de la televisión la relacionó nada menos que con Francisco, el papa argentino apasionado del fútbol.
El veterano mediocampista Juan Sebastián Verón, mundialista en Francia-1998, Corea del Sur/Japón-2002 y Sudáfrica-2010, también exhortó a no caer en el triunfalismo.
"No hay que subestimar a nadie. En principio, no es de las zonas más complicadas, pero hay que estar atentos para evitar sorpresas durante la competencia", dijo.
El capitán del argentino Estudiantes consideró que "es clave que todo funcione como un gran equipo, más allá de tener a Lío (Messi), que será una carta fundamental".
"Empieza fácil, pero es el Mundial más difícil por sentirse visitantes en la casa vecina y lo suficientemente grande (el vecino) para hacer del triunfo una causa nacional", señala el suplemento deportivo de La Nación.
Brasil "ya tuvo su Maracanazo uruguayo, muchos menos aceptaría un Maracanazo argentino", agrega y considera que "será para los argentinos un Mundial más hostil que el italiano (1990)".
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