La propuesta del Gobierno Petro de echar mano al Acuerdo de Paz firmado con las extintas Farc en 2016 para convocar a una Asamblea Nacional Constituyente generó un hecho inédito: que cinco expresidentes rechazaran de manera contundente la propuesta del líder del Pacto Histórico. “La Constituyente será usada para perpetuarse en el poder”, dijo el expresidente Iván Duque.
Aunque parezca insólito, la propuesta del presidente Gustavo Petro de echar mano al Acuerdo de Paz firmado con las extintas Farc en 2016 para convocar a una Asamblea Nacional Constituyente generó algo que pocas veces se ve en el país: que cinco expresidentes se pusieran de acuerdo para rechazar esta iniciativa del actual Gobierno.
Las palabras de Petro
Por medio de un extenso mensaje en sus redes sociales, el presidente Gustavo Petro indicó que el deber del Congreso es convocar a una Asamblea Nacional Constituyente.
“Se dirá que el Congreso hoy puede asumir su rol histórico. Está abierta la discusión política. En mi opinión le corresponde ya al poder Constituyente del pueblo el hacerlo; también está en discusión cual puede ser el medio para hacerlo: una asamblea Constituyente solo es un medio de varios para expresar el poder Constituyente. El papel histórico del congreso hoy, es tramitar su convocatoria, si no, el poder Constituyente, tarde que temprano, lo hará”, dijo el jefe de Estado.
El rechazo de Ernesto Samper
Este mensaje del mandatario generó un rechazo rotundo por parte de cinco exmandatarios. El último que opinó sobre este tema fue Ernesto Samper. “A la luz de estas normas vigentes no es posible legitimar la convocatoria de una Asamblea Constituyente en el Acuerdo de Paz de La Habana suscrito entre el Estado y las Farc: sería una Constituyente de facto, un salto al vacío de la institucionalidad que empezaría por desconocer el Congreso y la Corte Constitucional”, expresó.
Juan Manuel Santos
Hay que tener en cuenta que el expresidente Juan Manuel Santos señaló el pasado domingo que usar el Acuerdo de Paz para convocar una Asamblea Nacional Constituyente es un “absurdo”.
“Usar el Acuerdo de Paz con las Farc para convocar una Constituyente es un absurdo, esa fue precisamente una de las líneas rojas que mantuvimos en la negociación. La teoría de que el Acuerdo puede modificar las partes contratantes tampoco tiene asidero jurídico porque en los acuerdos especiales presuponen que el conflicto entre las partes continúa y ese no fue el caso entre el Estado y las Farc”, señaló.
“La Asamblea Constituyente sólo se puede convocar usando los procedimientos que establece la Constitución, cualquier intento de hacerlo por otras vías se enfrentaría con el poder legislativo, judicial, las Fuerzas Armadas y con la gran mayoría de colombianos”, complementó.
Duque y Uribe
Los expresidentes del Centro Democrático, Álvaro Uribe e Iván Duque, también reaccionaron a la iniciativa del Gobierno Petro. “Buscan una Constituyente sin seguir los procedimientos constitucionales, con el fin de perpetuarse en el poder, utilizando como pretexto el Acuerdo con las Farc o un eventual contrato por adhesión a las pretensiones del Eln”, escribió Duque en su red social X (antes Twitter).
“Todo el ejercicio popular, el derecho pueblo del Constituyente primario, todas las expresiones de democracia participativa, la constituyen la convocatoria de la Asamblea Constituyente, el plebiscito, el referendo, la consulta, todo eso está rigurosamente reglamentado en la Constitución, no puede el presidente Petro inventarse un mecanismo diferente para convocar una Asamblea Constituyente, eso sería un golpe de Estado”, dijo por su parte el expresidente Álvaro Uribe.
Andrés Pastrana
Finalmente, el expresidente Andrés Pastrana se expresó en contra de una Constituyente al firmar una declaración de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA).
“Constatando el anuncio realizado por el presidente de Colombia, Gustavo Petro, en cuanto a convocar una asamblea Constituyente alegando que sus planes de gobierno no alcanza a concretarlos por vía del parlamentarismo democrático y el respeto al principio de la separación de poderes en un Estado constitucional de Derecho, alertan sobre la deriva autoritaria que pudiera significar tal planteamiento, a la luz de las experiencias del socialismo del siglo XXI en Venezuela (1999), Bolivia (2006) y Ecuador (2007, 2008)”, exclamó.