Desde el 18 de mayo pasado está cerrado el tránsito vehicular en la carrera 16 con calle 21 de la ciudad de Neiva, en inmediaciones del Batallón Tenerife. El cierre obedece a trabajos que adelantan las Ceibas EPN sobre el puente ubicado en la vía que comunica el sur con el norte de la ciudad. Dos semanas después, los conductores que se ven afectados por el cierre se preguntan cuándo terminará el calvario, sobre todo en las horas pico. LA NACION averiguó.
Hernán Galindo
Dos semanas después del cierre de la carrera 16 a la altura de la calle 21 o avenida Tenerife, sigue el traumatismo vial, sobre todo en las horas pico para quienes tienen la necesidad de transitar de norte a sur o en sentido contrario en la ciudad de Neiva.
Son muchos los inconvenientes que encuentran los conductores a la hora de movilizarse por el sector, deben buscar vías alternas o esperar en trancones de más de 15 minutos para continuar su recorrido.
Los inconvenientes surgen a raíz de los trabajos que adelantan Las Ceibas Empresas Públicas de Neiva de restitución de la tubería actual, por una de 36 pulgadas, en el puente sobre el río Las Ceibas, contiguo al Batallón Tenerife.
Esta restitución garantizará, de un lado, el aumento de la vida útil del puente y de otro evitará el empozamiento de aguas que se presenta actualmente sobre la avenida en momentos de un torrencial aguacero.
Con el paso de los días, se aumenta el inconformismo entre conductores y comerciantes de la carrera 16 y la avenida 21 de Neiva, debido a la congestión vehicular que se presenta durante buena parte del día, pero que en horas pico se transforma en caos vehicular causado en algunos casos por los motociclistas que intentan pasar por donde sea, con un alto riesgo de generar algún accidente.
Actualmente, se transita en una sola vía en el sentido norte-sur, pero quienes van del sur hacia el norte deben buscar vías alternas.
Duración del cierre
Ricardo Vega, jefe de Planeación de Las Ceibas EPN, recordó que los trabajos que se adelantan tienen una duración proyectada de cuatro meses, en cuatro etapas por sectores. Con esto hizo claridad sobre el cierre en el primer tramo que es el que actualmente se adelanta en la carrera 16, a la altura del puente sobre el río Las Ceibas, en inmediaciones al Batallón Tenerife.
“Todos sabemos que, sobre las inmediaciones del Batallón, hay una ladera fuerte, una depresión fuerte y cuando llueve las aguas lluvias que se recogen en ese sector van a dar sobre la carrera 16, hasta la zona en donde termina la bajada de Buganviles”, dijo.
El funcionario manifestó que los trabajos para corregir esta anomalía se realizarán en cuatro etapas, cada una con una duración proyectada de un mes, por lo que hizo claridad en el sentido de que los trabajos de la primera etapa que están en marcha no durarán cuatro meses, sino uno.
La obra, en su totalidad, va desde el río Las Ceibas a la altura del puente de la carrera 16, hasta el semáforo que queda ubicado en el sector cuando se baja de Buganviles, continúa en el sector bajo el puente cerca del Hospital Universitario de Neiva y sigue por la vía que va hacia el oriente, por el sector frente al Distrito Militar, en una obra que está definida en cuatro intervenciones, de acuerdo al proyecto.
“El primer tramo viene desde el batallón, en el puente de la carrera 16 hasta la calle 21, ese es el tramo que ya iniciamos, de la obra que, en su totalidad, vale $6.136 millones. Ese es el primer tramo que se va a construir y una vez terminemos, quedará totalmente habilitado para no generar, más dificultades, con el tema de la movilidad”, sostuvo Vega.
Luego se avanzará en la construcción del tramo dos, que va desde la 21 a la 18, “ya hemos hablado con el señor contratista y con la interventoría para efectos de generar unos contraflujos para evitar, dificultades en términos de movilidad, es un tramo proyectado a 40 días”.
“Y de manera sucesiva, se cumplirá con los dos tramos restantes, con cierres en cada sector a intervenir, con los controles debidos para evitar de la mejor manera posible traumatismo en la movilidad”, argumentó Vega.
“Esa es una red que estamos construyendo en 36 pulgadas y lo que buscamos, básicamente, es que todas esas aguas lluvias que se generan en época de invierno, se canalicen de manera adecuada, estamos hablando de 1.500 metros lineales de red de tubería en PVC de 36 pulgadas; vamos a construir también unos sumideros de manera longitudinal, otros transversales, otros horizontales”, agregó.
Ricardo Vega concluyó manifestando que lo que buscan es generar las condiciones de acceso para que los ciudadanos no tengan problemas en épocas de lluvia con el tránsito y la movilidad.