De manera multitudinaria, sectores de la oposición y los inconformes, salieron ayer domingo a marchar en las principales ciudades, en contra de las políticas y reformas del presidente Gustavo Petro. A las manifestaciones se unieron sectores como el gremio de transportadores y médicos. El presidente Gustavo Petro dijo que las marchas son para ‘derrocarlo’ pero abrió espacio de diálogo con todos los sectores.
Hernán Galindo
Miles de colombianos salieron ayer domingo a las calles de Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla, Bucaramanga y otras ciudades del país para manifestar su oposición al Gobierno del presidente Gustavo Petro, en especial al manejo del sector de la salud y a su intención de reformar la Constitución convocando a una constituyente.
En un informe que elaboró el Puesto de Mando Unificado, en la sala de estrategia de la Policía Nacional, se identificaron ayer 21 de abril, 54 eventos relacionados con las marchas a nivel nacional: 23 marchas, 21 concentraciones, 7 movilizaciones, un plantón y 2 asambleas.
En Bogotá, la ciudad en donde se dio una de las mayores concentraciones, las movilizaciones terminaron en la Plaza de Bolívar en donde se concentraron unas 70 mil personas, según reportó la Alcaldía.
En Cali, aunque la lluvia de la mañana del domingo retrasó un poco la salida de la movilización, la asistencia no dejó de ser multitudinaria. Los asistentes se prepararon con carteles alusivos a su rechazo a las decisiones del presidente Gustavo Petro, una de ellas las intervenciones a las EPS. En esta ciudad se calcula que salieron unas 40 mil personas.
En Medellín, el reporte del secretario de Seguridad, Manuel Villa, refirió un balance positivo y sostuvo que unos 350 mil ciudadanos se congregaron en las diversas calles de la ciudad de Medellín para expresar su descontento.
El balance del Gobierno Petro
El ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, estuvo reunido en la sede de la Policía para hacer seguimiento al avance de las jornadas de movilización.
“Reconocemos el buen tono de las marchas; las autoridades hicieron presencia en todos los rincones. El gobierno le dio garantías a los ciudadanos para que pudieran salir a marchar”, dijo Velasco.
En materia del orden público a nivel nacional, no hubo registro de alteraciones o situaciones que hayan puesto en riesgo la seguridad para los ciudadanos.
Por parte de la Policía, “se destacó también la presencia de los ciudadanos de manera pacífica. La Policía Nacional destinó más de 23.000 de sus integrantes para contribuir con las concentraciones y facilitar que se dieran condiciones de buena convivencia”, expresó el general William Salamanca.
El concejal Juan Daniel Oviedo participó de las marchas e indicó que “está cansado de la improvisación de las políticas públicas de este gobierno”.
Laura Sarabia, mano derecha de Petro, a través de su cuenta de X, reconoció que la marcha fue multitudinaria: “Debemos afrontar en reflexión y autocrítica”, posteó.
“Si al presidente le importara Colombia, escucharía lo que está diciendo hoy la calle colombiana”, dijo la exvicepresidenta Martha Lucía Ramírez.
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Las marchas según Petro
El presidente, Gustavo Petro, hizo un balance de la jornada de ayer en todo el país. A través de su cuenta de X en un amplio post, entregó su punto de vista.
Según el mandatario, las manifestaciones contra el gobierno tuvieron más o menos 250.000 personas en todo el país, fueron fuertes en su orden en Medellín, Bogotá y Bucaramanga. En las demás ciudades, alcanzando 18 sitios, fueron débiles.
Afirmó que a las marchas se le respetó al máximo como se seguirá haciendo. “Una de las características centrales de mi gobierno es respetar la libertad de expresión y los derechos de la gente” y agregó que el principal objetivo de las marchas es gritar “fuera Petro” y derrocar el gobierno del cambio”.
Para Gustavo Petro, este proceso ya inició y es un golpe blando que anule la decisión popular por el cambio en el año 2022.
“Algunos sectores de los movilizados quieren un pacto que deshaga las reformas que van a favor del pueblo para mantener la captura de enormes cantidades de dinero público usados como ganancias de particulares”, agregó.
Dijo que “el rechazo a las reformas es de los que se creen dueños del dinero público, este rechazo para ganar clases medias se viste a través de las redes y los medios de mecanismos de seducción centrados en el odio y la mentira”.
Y continuó: “El presidente es guerrillero, dicen, o por su procedencia popular no nos representa, o porque es de izquierda no debe gobernar; es el odio el eje central del mensaje. Un odio que yo no quiero que regrese al poder porque mataría mucha gente quizás peor que como lo hizo en el pasado. Lo que añoran es la represión abierta, las masacres paramilitares y los asesinatos de jóvenes”.
Añadió que “ese pasado de mafiosos en el poder no debe volver. Hoy se expresaron en libertad unos, las fuerzas populares deben responder, este 1 de mayo. No se trata de dividir al país, ya viene dividido. Se trata de que suene también la voz popular. Ante estas voces diferentes, el gobierno buscará caminos de entendimiento. Si la derecha quiere burlar las elecciones e irrespetar el voto del pueblo no habrá entendimiento. El pacto nacional es por el futuro y no por el pasado. La suerte del gobierno dependerá exclusivamente del apoyo del pueblo. Que se escuche el pueblo entonces. Siempre hemos estado abiertos al diálogo y siempre hemos respetado nuestros principios por los cuales fuimos elegidos. El cambio consiste en más Justicia Social y más equidad para la gente”, cerró su post el mandatario colombiano.