La Nación
Múltiples dudas generó el Festival Rock al Sur que la Alcaldía de Pitalito llevó a cabo a través del Instituto de Cultura
HUILA

Las cuentas del polémico Festival Rock al Sur en Pitalito

Múltiples dudas generó el Festival Rock al Sur que la Alcaldía de Pitalito llevó a cabo a través del Instituto de Cultura. Aunque muchos creían que era totalmente gratis, el evento resultó siendo mixto, por lo que quienes quisieron, compraron palcos entre uno y tres millones de pesos. La jornada tuvo un costo total de $475 millones y el recaudo fue de $320 millones. Según el mandatario de los laboyanos, esos recursos ingresaron al Instituto de Cultura y serán reinvertidos en las festividades de San Pedro.

Johan Eduardo Rojas López

Periodistamultimedia4@lanacion.com.co

El pasado 30 de abril, se llevó a cabo el Festival Rock al Sur en Pitalito, Huila, en donde la banda principal y mejor paga de la jornada fue Vilma Palma e Vampiros, cuya presentación, según sus asistentes, fue impecable. Sin embargo, hay ciertos puntos que han causado dudas frente a por qué siendo un evento financiado con dineros públicos se cobró por su entrada, cuánto dinero se recaudó y en qué será reinvertido.

Estos y más interrogantes fueron aclarados por el alcalde de Pitalito, Yider Luna Joven, quien dejó claro que el concierto fue todo un éxito dado que se cumplió el aforo de las 10 mil personas, de las cuales el 80% ingresaron de forma gratuita y solo el 20% restante pagó palcos. Todo este evento lo realizó directamente la administración municipal a través del Instituto de Cultura.

“Los recursos generados por el mismo evento, pues son los recursos que quedan como ‘colchón’ en el Instituto de Cultura, que es quien hace los eventos por parte del municipio y esos recursos van a servir para invertir nuevamente en las actividades de San Pedro donde pretendemos hacer lo mismo, una venta de palcos para quienes puedan pagar y el resto gratis para que la comunidad pueda participar”, aseguró el burgomaestre.

Manifestó también que este espacio nunca antes visto en el valle de laboyos, generó gran movimiento en el comercio, además, se impulsó a los emprendedores que tuvieron un espacio para ofrecer sus productos.

El recaudo

El Festival, según las cuentas de la administración municipal, dejó un recaudo de aproximadamente $270 millones en ventas de palcos, más un adicional de las utilidades generadas por porcentajes de los modelos de negocio, dejando como cifra total, cerca de $320 millones que pasó a manos del Instituto de Cultura. Es de aclarar que, se habla de una cifra aproximada porque solo hasta el próximo martes realizarán una mesa técnica que les permitirá aterrizar con exactitud los porcentajes.

Sin embargo, la realidad es que la cifra de recaudo no alcanzó al rubro de inversión que la Alcaldía de Pitalito, le giró al Instituto de Cultura. “En el evento como tal se fueron alrededor de $470 millones. Ahora bien, nosotros como administración estamos adelantando actividades ante el receso económico de la ciudad para buscar una reactivación”, dijo.

Sostuvo que es falso el rumor de que las transacciones de los palcos se estaban realizando a cuentas bancarias que no corresponden a la entidad organizadora, y explicó que “no es verdad que se dispuso una cuenta personal, todo el dinero que entró se dispuso a una misma cuenta, a través del Instituto de Cultura, con un funcionario de allí. Aquí no hubo particulares vendiendo palcos, ni hubo cuentas aparte en las cuales se hayan recibido recursos por la venta de palcos y demás”, enfatizó el mandatario.

¿Fueron injustos los pagos de artistas?

La brecha entre los pagos a las presentaciones de los artistas fue notoria, pues mientras que a Vilma Palma e Vampiros se les pagó por su presentación cerca de $265 millones, los artistas locales recibieron entre $1 millón y $3 millones.

“A los grupos locales y regionales, no solo se les dio participación en el evento, sino que también se les pagó. O sea, es algo muy bueno porque a ellos nunca los tienen en cuenta en este tipo de eventos y para nosotros es fundamental tenerlos en cuenta. Hay que hacer mención que, para poder traer un artista de talla internacional, pues obviamente hay una trayectoria y no es lo mismo, porque hay que pagar una cantidad de impuestos impresionantes y logística adicional. La mejor rentabilidad de un grupo local es que pudo subir a una tarima con un grupo internacional y aparte de eso se les brindó una tarima con 10 mil personas para escucharlos”, precisó Luna Joven.

Añadió que, sería imposible realizar un festival solo con grupos locales dado que quizás no “llamaran la atención suficiente para atraer turistas y generar esa dinámica económica que se logró”.

“No se le vendió el evento a terceros”

El alcalde laboyano afirmó también que contrario a lo que se dice, no hubo terceros a quienes les vendieron el evento, pues Fomcultura, es un fondo de cultura que funciona con la parte pública y se realizó un convenio interadministrativo para evitarse un proceso de licitación. Bajo ese entendido, con ellos lo que se hizo fue contratarse el artista internacional y toda la parte de la logística, más no tuvieron que ver con la venta de los palcos y sus utilidades.

Ahora él como primera autoridad del municipio, es quien deberá ser garante de que los recursos que fueron recolectados y que, aunque en un principio se dijo que serían para cubrir los gastos del mismo evento, ahora se aclara que serán destinados para las festividades de San Pedro que los últimos años han costado cerca de $1.000 millones.

Los reparos

Franky Vega Murcia, concejal de oposición de Pitalito, aunque reconoció que la idea del concierto realmente fue positiva porque contó con amplia asistencia, considera que los costos fueron elevados.

“Creo que $475 millones para un concierto de una banda es bastante oneroso para el caso de Pitalito y los recursos que lograron recaudar creo que no son suficientes. Lo importante es comparar precios porque creo que la banda estuvo en otros departamentos y municipios, entonces, hay que ver cuáles fueron los costos en otros territorios porque al parecer, está sobrecosteado”, expuso.

Empero, en términos generales, para el cabildante el evento para fortalecer el ámbito cultural es válido y la gente lo disfrutó. Por el momento, está atento al trámite que tenga el dinero recaudado, pues lo que se espera es que esos recursos que ingresaron al Instituto de Cultura y no a particulares, entren al presupuesto para que puedan financiar otras actividades culturales.

“El Instituto de Cultura tiene que dirigir sus esfuerzos a ese tema de hacer eventos culturales y promover la cultura. Sin embargo, la cultura orientada a conciertos, consumo de licor y eso, no es tan cultura, hay que orientarla más a temas autóctonos, de tradiciones propias. Es fundamental dignificar el trabajo de los artistas locales porque sí es injusto que mientras a algunos les pagaban millonadas a otros les pagaban muy poco”, concluyó.