Nueve años parecen no haber sido suficientes para culminar uno de los proyectos más ambiciosos e importantes de la región. Para el Anillo Turístico del Sur se han suscrito cerca de diez contratos, ha tenido que someterse a alrededor de diez debates de control político y ha sido noticia por sus distintos ‘enredos’. En la actualidad hay varios contratos incumplidos, uno a punto de ser liquidado y otro en ejecución. ¿Cuándo terminarán las obras?
Johan Eduardo Rojas López
Periodistamultimedia4@lanacion.com.co
Estudios y diseños mal elaborados, contratos incumplidos y la poca planificación, han sido situaciones determinantes para que el Circuito Turístico del Sur o mejor conocido como Anillo Turístico del Sur, aun sea un proyecto en riesgo que, al parecer, y según la administración departamental actual, se espera ejecutarla con seriedad.
El proyecto consiste en la intervención y pavimentación de vías que comunican a los municipios de Pitalito, Isnos, San Agustín y Saladoblanco, con el fin de incentivar el turismo en esta zona del departamento.
Esta mega obra que le ha quitado cualquier tipo de esperanza a la ciudadanía, lleva 20 años en el radar. Así lo explicó el diputado Sergio Trujillo, quien contó que, la iniciativa de este proyecto surgió durante el primer mandato de Rodrigo Villalba como Gobernador del Huila para el periodo 2004-2007, sin embargo, se materializó bajo el mandato de Carlos Mauricio Iriarte, quien en el 2015 anunció con bombos y platillos la primera intervención. Esto tras el gobierno de Luis Jorge Pajarito Sánchez García, Cielo González Villa y Luis Guillermo Vélez.
Desde ese momento, la historia es bien conocida y todo ha girado en torno a incumplimientos, evaluaciones y promesas que se han ido con los mismos gobernantes. Se espera entonces, que este proyecto culmine bajo el mismo mandato de la persona que arrancó la iniciativa; empero, algunos están incrédulos, mientras que otros, nuevamente avivaron sus expectativas.
Así avanzan los contratos
Todo esto se discutió en un nuevo debate de control político citado por el diputado del partido Conservador, Nelson Jesús Murcia Ome, en donde se evidenció que en la actualidad hay cinco contratos vigentes, tres de ellos suspendidos por incumplimiento, otro en miras de liquidarse y solo uno en ejecución.
Martin Londoño, profesional adscrito a la Secretaría de Vías e Infraestructura del Huila, informó que ahora lo que viene es adelantar los debidos procesos de incumplimiento, recuperar los recursos no invertidos, sancionar al contratista incumplido y liberar los tramos para posteriores inversiones, pues de eso depende la demora para la culminación del proyecto general.
“En este momento si los informes de incumplimientos y los procesos que se van a adelantar llegan a feliz término, los recursos se recuperarían totalmente, pero si no, se perderían. Aquí a lo que nos obliga esta situación es a replantear los proyectos, volver a armar presupuestos de lo que quedó faltando de los contratistas incumplidos, recuperar los tramos y poder asignar recursos para culminar”, afirmó el profesional.
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Sinsabor
Ante esto, el diputado Murcia Ome aseguró haber quedado con un sinsabor luego del espacio deliberativo que lideró. Lo anterior, debido a que los contratistas de las obras suspendidas por incumplimiento no llegaron.
“La no asistencia de los contratistas citados que están en proceso de incumplimiento nos deja un sinsabor. Ellos no le han puesto la cara a los huilenses, dicen que la Gobernación incumplió el contrato y la Gobernación dice que no es así y es muy difícil creerles a quienes no vienen a debatir”, aseguró el citante.
Detalló además que, el contrato de 16 kilómetros que está en ejecución se está desarrollando en tres tramos. El primero de 1.6 kilómetros será desde el puente Mazamorras al centro poblado El Palmar, el segundo de 9.1 kilómetros de Isnos a Salto de Bordones y el tercero de 5.3 kilómetros va del Saldo de Bordones a La Laguna.
El proyecto no está en veremos
“Tenemos fecha de terminación de este contrato de 26 meses y empezó en octubre de 2023. Aunque la Gobernación no ha desembolsado la plata de los contratos incumplidos, estos siguen vigentes y entonces al haber resignación se incrementarían los costos, pero habría que esperar la solución jurídica. Este proyecto no está en veremos, está en proceso de ejecución y somos nosotros quienes ayudaremos a que este proyecto sea un hecho”, concluyó el diputado.
En supervisión
Por su parte, Andrés Camilo Cabrera, secretario de Vías e Infraestructura del departamento, indicó que el contrato que se está ejecutando se encuentra dentro del cronograma de ejecución que está supervisado por la interventoría.
“La idea es que se sostenga dentro de las holguras que pueden generar alertas tanto si se retrasa o se avanza mucho en la obra. Los otros contratos siguen el proceso de incumplimiento dado que, incluso luego de los llamados de atención los contratistas casi que abandonaron las obras”, agregó.
Enfatizó en que el nombre de Eddier Morón predomina en estos incumplimientos, toda vez que, en un lado firmó como contratista y en otro como suplente del representante legal; incumpliendo en ambos.
Sin veedurías
Dentro de este contexto también se expuso que lastimosamente no se cuenta con ningún acto de veedores que se constituyeron en ese momento y tampoco actuales, los cuales pudieran ser vigilantes de la realidad de estas obras.
“En total estamos hablando de una inversión de casi $90 mil millones, sin embargo, no se puede dar un porcentaje cercano porque está compuesta por diversos contratos que tienen diversos porcentajes de ejecución. El contrato que está en ejecución cuenta con los recursos necesarios para poderlo terminar sin ningún inconveniente y nuestro Gobernador hace claridad de que a él le interesa que en esta administración también se de en lo posible, feliz término al anillo turístico del sur”, comentó el funcionario.
Él a su vez, dijo que el dinero no se ha malgastado porque aún continúa en las arcas de la Gobernación del Huila.
Concluyó que “venimos haciendo el seguimiento a todos, hemos realizado un par de comités para ser muy específicos con las interventorías, solicitando planes de choques. Vamos a poner mano dura para que no dejen que se incurran en estos problemas”.
Al solucionarse los inconvenientes de estos contratos y ejecutarse el 100% de esas obras, el proyecto se daría por culminado.
Contratos:
Contrato 1046 de 2015: suspendido
Construcción en pavimento flexible de la vía San Agustín – Obando, bajo la representación legal de Eddier Morón. Mediante ese contrato se pretendía pavimentar 6 kilómetros, pero con una ejecución del 40%, es decir, del 2.7 kilómetros, el contratista incumplió; motivo por el cual en este momento se encuentra en un proceso ante el Departamento Administrativo de Contratación.
Contrato 1111 de 2015: suspendido
Por esta misma época se suscribió un contrato que tenía como objeto la construcción de pavimento flexible entre el sector de Bordones – La Laguna, bajo la representación legal de Ingrid Galue.
Este correspondiente a 6.3 kilómetros y el contratista de obra también incumplió, dejándolo bajo el siguiente estado: se logró la pavimentación completa de 3 kilómetros, otro kilómetro quedo con primera capa de carpeta asfáltica y los 2.3 kilómetros faltantes quedaron ampliados, con las obras de arte construidas y pendiente de la instalación de la estructura de pavimento, por lo cual, alcanzó un avance del 76%.
Contrato 998 de 2023: en ejecución
Este contrato determinado por un valor de $51 mil millones está en ejecución y tiene por objeto pavimentar 16 kilómetros. Hasta el momento se ha avanzado en porcentaje de obra un 4% haciendo claridad que se está trabajando desde la ampliación de la calzada y estos ítems no son los más costosos del proyecto.
El contrato se adjudicó al consorcio Montebello el día 14 de marzo de 2023, previo al inicio a las labores se realizó una cesión a la participación del consorcio quedando de la siguiente manera: V&M Ingeniería S.A.S con el 50%, Explanan SAS con 40% y Civcol S.A.S con 10%.
Contrato 1157 de 2015: por liquidarse
Este contrato fue adjudicado el 16 de diciembre de 2015 al Consorcio Puente Guacacallo y tenía como objeto la construcción a todo costo del puente vehicular sobre el río Magdalena en la vía cruce a Guacacallo – La Laguna, municipio de Pitalito, por valor de $ 4.297.321.487 con un tiempo de ejecución de 8 meses.
El porcentaje de ejecución es de 0% debido a que los estudios y diseños suministrados Fonade no cumplían con la normatividad vigente y además tenían insistencias de tipo biotécnica que obligaron a no poder construirlo. Allí hubo que hacer varios chequeos y se logró a través del contratista plantear un diseño que valía más de lo estipulado, por lo cual, no fue posible seguir adelante y en este momento se trabaja en la liquidación para volver a contar con recursos y poderlo construir.
Reacciones
Armando Acuña, diputado del Partido Alianza Verde
“La verdad la gran preocupación es que nace una muy buena idea, necesaria para el turismo creciente del sur del departamento, pero hubo mala planeación y nunca hubo responsables de eso. Se hicieron unos contratos que nacieron enfermos, entonces se nos convirtió en un circuito de meta plata y no ver obras concluidos”.
Omar Alexis Díaz, diputado del Partido Conservador
“La realidad que hoy vive está construcción es triste porque lo único que hemos encontrado son fallas, negligencia administrativa, pero sobre todo poca mano dura a los contratistas; no es posible que se siga perdiendo plata. Se está doblando en la proyección inicial que se tenía y desafortunadamente esa plata sale del bolsillo de los huilenses para pagar la mala planificación. Aquí le hacemos el llamado a la Contraloría departamental para que revise este proyecto crítico que podría estar a un paso de convertirse en un elefante blanco”.