La Nación
 País descuadernado y caótico 1 26 abril, 2024
COLUMNISTAS

 País descuadernado y caótico

 

Marcos Silva Martínez

Se catapultan evidencias del caos institucional, del colapso ético y moral del poder y de la resistencia de las ramas del poder público, para tomar decisiones que reviertan el caos institucional presente.

Los ciudadanos, delegan en los elegidos el ejercicio del poder. Y ellos deben regirse por altos estándares de rectitud, responsabilidad  y honradez.  Ocurre lo contrario en Colombia.

Todo el desorden, irresponsabilidad e inmoralidad en el ejercicio de los poderes públicos institucionales, nacional, regional y local, es consecuencia y prueba de la anarquía y caos evidentes.

El imperio de la concupiscencia e inmoralidad,  en el sistema de salud, en el sistema de contratación pública, en el manejo del presupuesto público, en el régimen tributario, en el  precario desarrollo económico-industrial,  en el sistema de pensiones, en el modelo educativo, son pruebas del desgobierno, consecuencia de la irresponsabilidad  del poder y  de su condición de  rehén de la politiquería, el clientelismo y de las organizaciones criminales de cuello blanco.

Se es corrupto e inmoral por acción u omisión.

El ejercicio del poder siempre está al servicio de élites económicas y sociales. En casi ocho años de presidencia del Sr. Santos, por iniciativa del ejecutivo, el congreso aprobó tres reformas tributarias. Todas fallidas, fiscal y socialmente, pero a favor del capital.

Otro tanto hicieron anteriores gobiernos, en diferentes sectores de la actividad pública. Y  no se les dio la gana corregir el caótico sistema nacional de salud, para no afectar a los explotadores del  criminal negocio de la salud, igual que en otros sectores de la administración.

El sistema de pensiones está colapsado. Vía presupuesto, en el 2017, destinaron más de $40 billones. De más de 6 millones de mayores de 65 años, solo 1.7 millones tiene pensión y más del 70% recibe menos de 2 salarios mínimos mensuales, mientras el 11% recibe el 86% de las mesadas, superiores a $15 millones. Y somos  campeones en desigualdad e inequidad social. Tenemos la mayor tasa de desempleo del hemisferio.

La educación es un negocio para producir ganancias y mediocridad. La educación pública está en crisis total. Se requiere reformas a fondo.  El  poder intervenir,  para proteger el perverso negocio. Se satura el país con  Colegios y universidades de garaje (ver resultado Pruebas Saber 11 2017), bajo la anuencia y complicidad del poder.   Ecuador  dio ejemplo. En el año 2012, cerró definitivamente 14 universidades de garaje.  A la juventud no la deben engañar. En materia de educación, hay papás que confunden el tocino con la velocidad y otros que creen que las palancas  resolverán todo. Están engañados.

La dinámica problemática nacional, si no se controla, corrige y revierte, solo puede avizorar un futuro fallido para próximas generaciones. Los electores, deben apersonarse de los desafíos de tal amenaza.

Parece que ningún candidato quiere asumir las responsabilidades  necesarias, para diseñar y comprometerse a aplicar correctivos capaces de cambiar el apocalíptico panorama y modelo económico-político.

Es necesario que el elector, en cuanto sea posible,  defina metas para desarrollen los delegatarios  del poder y fije a los candidatos condiciones a cumplir, para hacerse acreedores del voto.

Es imperativo moral y ético, de todo ciudadano,  exigir a los gobernantes  y contribuir para rescatar la nación de las garras de los corruptos y criminales de cuello blanco.