Francisco Argüello
Inauguraron la doble calzada Neiva- Aipe en un evento que merecía toda la exaltación. Iván Duque sacó pecho, pero le faltó entender que la movilidad entre Bogotá hacia el Tolima y el Huila es un desastre. Olvidaron los contratistas que adelantan las obras de readecuación entre Girardot y Espinal que después de dos años, las festividades del San Pedro prometían reactivar la economía en estos departamentos porque la gente estaba ávida por el descontrol y la celebración tras el encierro. Sin importarles avanzaron en los trabajos, no ajustaron horarios y el corredor de movilidad colapsó. Viajar desde Bogotá hacia Neiva o al revés se volvió un calvario y las 7 horas que un conductor destinaba para llegar a su destino se convirtieron en 12 y hasta 15. Obreros en la vía, obstrucciones por horas, poca información en la carretera y el desespero de los conductores por llegar pronto, es el común denominador. ¿No podían reprogramar los trabajos? O, ¿redoblar el número de trabajadores previamente para acelerar las adecuaciones? Quien no viaje constantemente a Bogotá por tierra le valdrá huevo está columna, pero quien lo haga constantemente se identificará con la odisea de recorrer Cundinamarca, Tolima y Huila en medio de la desidia. La economía se afecta, así nadie lo diga. Los camiones que transportan combustible y todo tipo de carga, así como los carros de servicio público y privado, tardan más tiempo en la carretera y aumenta el gasto de gasolina. Para rematar, en el Huila no hubo nadie que le pusiera freno de mano a las aerolíneas que aprovecharon la temporada para disparar las tarifas.
El gobernador Luis Enrique Dussán debería liderar una mesa regional con el Invías y los gobernadores del Tolima, Putumayo, Caquetá y Cundinamarca así sea tarde. O seguramente espera hacerlo después del 7 de agosto. Al fin y al cabo, Iván Duque tiene el sol en la espalda y lo que diga poco importa.
Nota uno: Neiva vivió como nunca el San Pedro después de dos años de encierro. El problema es que no reinó el tapabocas y la gripa dembuló como nunca. Ya vendrán las nuevas cifras del COVID-19. Ojalá no pasen una factura tan alta.
Nota dos: pasaron las fiestas y empezará la campaña política regional. ¿En el Huila hay de dónde escoger? Ya habrá tiempo para hablar del tema. No se aceptan equivocaciones.