El próximo lunes 8 de agosto estará radicado en el Congreso de la República el proyecto de reforma tributaria por parte del gobierno de Gustavo Petro. A una semana de conocer el documento oficial, son varias las medidas enunciadas sobre lo que contendrá la propuesta.
CATERIN MANCHOLA
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Los $50 billones que aspira percibir el gobierno de Gustavo Petro durante los cuatro años de su mandato mediante una nueva reforma tributaria, serán fruto del recaudo por medio de nuevos impuestos, de una fuerte lucha contra la evasión y de eliminar beneficios fiscales.
Así lo ha indicado el designado ministro de Hacienda José Antonio Ocampo, al precisar que tienen una meta inmediata de $25 billones, pero esta irá aumentando gradualmente hasta los $45 o $50 billones dependiendo, básicamente, de los resultados de las medidas contra la evasión.
El gobierno ha dicho que la reforma estará centrada más en personas naturales que en las empresas y para eso se harán cambios en el impuesto sobre las rentas. El 1% de la población más adinerada del país ascendería a más de 40.000 personas y serán quienes pagarán más. La base de este grupo poblacional parte de quienes ganen más $10 millones de pesos por mes.
Los anuncios de igual manera indican que se gravarán las pensiones más altas, de más de $10 millones en adelante.
Además, se eliminarán las exenciones fiscales tanto para personas naturales como jurídicas. Entre esos, los que incentivan la extracción minero-energética y privilegian primordialmente a personas naturales y jurídicas de altos ingresos y patrimonio. Según lo estimado por el próximo gobierno, esos beneficios tributarios que se erradicarán equivalen a casi el 2% del Producto Interno Bruto (PIB).
También se enfocará en los dividendos y de acuerdo con la propuesta ahora será obligatorio declararlos y pagar impuestos, pues se aumentará el porcentaje de pago a partir de ciertas cifras del 2% como es ahora al 15%.
Así mismo, se elevaría del 10% al 35% la tarifa del impuesto por ganancias ocasionales por alguna actividad o venta, al igual que las ganancias ocasionales provenientes de loterías apuestas y similares pasaría del 20% al 35%; y aplica tanto a empresas como a personas.
Para las zonas francas también habrá medidas. Las empresas que están ubicadas en estas superficies gozan de menor impuesto de renta, pero deberán exportar más y cumplir con las metas que fijará el gobierno, de lo contrario, comenzarán a pagar el tributo normal del 35%, pues su razón de ser es vender en el comercio internacional, no en el nacional como viene sucediendo en muchos casos.
Y aunque no es en aras de lograr una cifra robusta de recursos, sí se impondrá un impuesto a las bebidas azucaradas y a los alimentos ultraprocesados. Para el gobierno electo, el objetivo es desincentivar el consumo de las mismas y propender por una mejor fuente nutricional.
El Ministro designado ha indicado que la evasión en Colombia está cercana a los $80 billones y por eso la evasión es otro de los pilares en los que se trabajará para reducir esa cifra.
También divulgó que si logran sus objetivos por medio de esta reforma, luego presentarán otra, pero para bajarle los impuestos a las empresas. Eso dependerá del éxito que tengan con la propuesta que radicarán el próximo lunes 8 de agosto.