Por lo menos 185.500 estudiantes matriculados en instituciones educativas oficiales recibirán en casa la alimentación escolar. En Neiva por cada estudiante recibirán un mercado de 50.000 pesos mientras dura la emergencia sanitaria.
RICARDO AREIZA
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Los estudiantes de escasos recursos económicos, matriculados en los colegios públicos podrán continuar recibiendo la alimentación escolar. Sólo que ahora, no recibirán el complemento alimenticio en los restaurantes escolares sino en sus propias viviendas.
Por lo menos así lo definió el Gobierno Nacional en el paquete de medidas proferidas extraordinariamente por la emergencia sanitaria, declarada hace dos semanas.
Según la disposición nacional (Decreto 470 de 2020) expedido el martes pasado faculta a los alcaldes y gobernadores para que faciliten la ‘alimentación escolar para aprendizaje en casa’.
Sin embargo, no será fácil. El acople jurídico a las medidas de la emergencia sanitaria dificultan en medio de esta crisis la aplicación inmediata de la medida.
Sin servicio
En el caso de Neiva, el operador del programa, la Cooperativa de Inversiones Surcolombiana (antes Alfaba), sorpresivamente canceló unilateralmente el contrato que venía administrando desde el año pasado, argumentando que “registraba pérdidas”.
Al no tener una autorización para incrementar significativamente el valor de las raciones que restaban, prefirió entregarlo, con un excedente pendiente de 6.000 millones de pesos sin ejecutar.
La decisión fue comunicada el 5 de marzo, fecha en la que finalizaba el periodo para la entrega de las raciones contratadas.
“Esa circunstancia nos generó serios inconvenientes para suministrar el servicio al comenzar el año escolar, pero además con problemas de cobertura”, aseguró el secretario de Educación de Neiva, Geovanny Córdoba Rodríguez.
La decisión fue comunicada antes de la emergencia sanitaria decretada por el Gobierno Nacional, como estrategia para contener la expansión de la pandemia. E
El contrato beneficiaba a 38.500 estudiantes de Neiva que ya no reciben las minutas. El convenio con el operador ya entró en liquidación. El excedente asciende a 5. 300 millones que se dejaron de ejecutar.
Flexibilización
Ante esta circunstancia imprevista y las implicaciones jurídicas, la Bolsa Mercantil, la encargada del proceso de selección, recomendó la liquidación del contrato con la Cooperativa Surcolombiana de Inversiones. Así se hizo. Actualmente se surte ese proceso, en medio de la emergencia sanitaria.
La ministra de Educación, María Victoria Angulo anunció la flexibilización de los procedimientos para garantizar que la alimentación pueda llegar directamente a los estudiantes beneficiarios, sometidos al confinamiento en sus hogares para prevenir la propagación del virus.
La iniciativa cubrirá a por lo menos 185.500 estudiantes del Huila, incluyendo a Neiva y Pitalito, entidades certificadas.
Mercados en Neiva
El Ministerio de Educación planteó tres opciones: la entrega de alimentación industrializa (complemento alimentario listo para consumo, compuesto por alimentos procesados y no procesados).
La entrega un bono alimenticio por valor de $50.000 que se puede canjear por alimentos determinados en los puntos acordados para adquirir los alimentos o la entrega de mercados (una canasta básica de alimentos equivalentes a un tiempo de comida al día por un mes). La entrega del paquete alimentario será mensual con la distribución para cuatro semanas por cinco días.
“En el caso de Neiva, optamos ayer por la entrega de mercados a las familias de los estudiantes matriculados en las instituciones educativas públicas”; confirmó Córdoba Rodríguez.
“En estas circunstancias, vamos a entregar un mercado por cada estudiante, por un valor de 50 mil pesos. Para ejercer un efectivo control vamos a entregar un mercado semanal por cada estudiante”, precisó el funcionario.
“Esto quiere decir, que si una familia tiene dos hijos asistiendo a clases en una institución pública recibirá dos mercados por el tiempo que dure la emergencia”.
El comité operativo de la Secretaría de Educación, la Oficina de Contratación y el Coordinador del Programa de Alimentación Escolar, están definiendo los términos y condiciones del proceso para proceder a la adjudicación.
“El proceso se adelantará por contratación directa y esperamos adjudicarlo la próxima semana para iniciar las entregas lo más pronto posible, de acuerdo con los lineamientos que recibimos del Ministerio de Educación”, explicó Córdoba.
En el Huila
En los municipios no certificados, distintos a Neiva y Pitalito, el programa de alimentación escolar beneficia a 116.800 estudiantes titulares de derechos.
“En las tres zonas, estaban contratadas desde enero de este año, 87.433 almuerzos y 29.363 complementos alimenticios que quedaron suspendidos por la interrupción del calendario escolar”, precisó el secretario de Educación, Luis Alfredo Ortiz.
La contratación para este año escolar, en condiciones de normalidad, costaba 14.640 millones de pesos, con tres operadores, uno para cada una de las zonas en que se dividió el departamento. Los contratos deberán reanudarse una vez se supere la emergencia sanitaria.
“Ahora, con la emergencia, estamos diseñando el mecanismo para garantizarle a los estudiantes, titulares de derechos, la alimentación escolar, complementariamente con una decisión del gobierno departamental de entregar 60 mil mercados a las familias más vulnerables”, precisó.
En su criterio, el esquema está en construcción. El mecanismo se viene perfeccionando con el Ministerio de Educación para garantizar la alimentación escolar en esta crisis.
Limitaciones
De acuerdo con una circular del Ministerio de Educación, la entrega de estos alimentos debe hacerse directamente al padre, madre, acudiente, cuidador o tutor de los menores sin que se les exija otro documento distinto a los datos completos del estudiante efectivamente matriculado, registrado en el Simat.
Las entregas se harán debidamente programadas por establecimiento, por sede y por curso evitando aglomeraciones y con buen manejo de las recomendaciones dadas por el Ministerio de Salud.
“Este se convierte en un primer obstáculo porque los docentes y directivos docentes saldrían a vacaciones, lo que impediría la certificación de los beneficiados”, explicó Ortiz Tovar.
Las nuevas pautas
Las entidades territoriales (municipios y departamentos) podrán ejecutar el programa de alimentación escolar durante el periodo de la emergencia haciendo uso de los contratos vigentes, ajustándolos o adelantando nuevos contratos, de conformidad con lo establecido en el decreto 440 del 20 de marzo de 2020.
En todo caso se trata de suministrar el complemento alimentario para consumo o preparación en casa, como medida de aporte al bienestar durante la emergencia, ya sea en semanas de actividad académica o de receso estudiantil.
Asimismo establecerán los mecanismos y parámetros que les permita la identificación real de la necesidad y de esta manera atender a los beneficiarios más vulnerables a fin de evitar desperdicio de alimentos.
Igualmente deben considerar la real posibilidad de suministro en condiciones de inocuidad y sanidad. De esta decisión de re focalización deben tenerse los soportes correspondientes.
