Con mucha razón, los cafeteros del Huila, urgieron al Gobierno Nacional el fortalecimiento de los servicios de extensión. Un convenio con la Gobernación del Huila está a punto de terminar y los programas de asistencia técnica, claves para incrementar la producción y la productividad quedarán en el aire.
Los programas de mejoramiento de la infraestructura productiva, la reconversión de los beneficiaderos y los servicios de extensión en todos los municipios productores es hoy una prioridad si queremos conservar el primer lugar que nos permita competir con mayor fuerza en el mercado internacional. La calidad, la diferenciación y el valor agregado son elementos fundamentales de competitividad para la industria del café. Y se imponen rutas imprescindibles de sostenibilidad, desarrollo científico y tecnológico y reconversión. Incrementar las exportaciones de cafés especiales y diversificar los destinos y los productos con valor agregado, son hoy grandes metas pero hay que imprimirle calidad. La productividad del cultivo depende en gran medida de la edad y de la densidad de siembra.
El Huila ha sido pionero igualmente en renovación de cafetales con variedades resistentes. Y en este campo, el gobierno seccional ha sido un aliado indiscutible para la reconversión, la adopción de variedades de café mejoradas y el incremento de la tecnificación de los cultivos.
De ahí el apoyo fundamental para la entrega de fertilizantes, liderados por el Ministerio de Agricultura, acompañado por supuesto de los análisis de suelos que adelantarán expertos. No obstante, este incentivo debe mantenerse y ampliarse. El apoyo de los municipios es vital para mantener los extensionistas. Llevar la asistencia técnica especializada a los 35 municipios productores se convirtió en una bandera para el nuevo gerente General de la Federación Nacional de Cafeteros. Este fue uno de los compromisos sagrados que adquirió para conservar el parque cafetero. A mediano plazo, la implementación de la caficultura climáticamente inteligente será un horizonte.
Y será por supuesto, otro paso para incorporar en la caficultura estrategias de adaptación al cambio climático.
Los avances logrados por el Huila en este sentido salvó la producción nacional el año pasado, duramente afectada por los fenómenos climáticos. De ahí la urgencia de la dirigencia cafetera para exigir del nuevo zar cafetero, los presupuestos que le corresponden en razón a su volumen de producción, pero ante todo, para asegurar los servicios de extensión, que beneficiará a pequeños y medianos cafeteros.
El Huila, con el más moderno parque cafetero renovado, con un buen manejo integrado de plagas y enfermedades, con la aplicación de prácticas de producción y con planes de comercialización con los más altos estándares está llamado a ser campeón de campeones en cafés de alta calidad.
“Los programas de asistencia técnica, claves para incrementar la producción y la productividad quedarán en el aire”.
EDITORIALITO
En deplorables condiciones de mantenimiento se encuentran las vías en el noroccidente del Huila. Las carreteras hacia Palermo, Yaguará y El Pital están en estado crítico. El paso de vehículos pesados están agravando la infraestructura. Y nadie se apersona.